sábado, 9 de julio de 2022

CARTA XLIII. De la orden del Hacha, propia de Tortosa.

CARTA XLIII. 

De la orden del Hacha, propia de Tortosa: nuevos documentos en prueba de su existencia: por qué se llaman amazonas las mujeres a quienes se concedió: verdadera etimología y origen de la palabra hacha: biblioteca de la catedral de Tortosa: noticia de algunos MSS.: edición antigua de Tortosa en el siglo XV.

Mi querido hermano: Pídesme que diga algo de la orden de la Hacha, a cuya fundación dio motivo el valor de las mujeres de Tortosa en el siglo XII. Así fue que conquistada de los moros esta ciudad por el conde D. Ramón Berenguer IV, y ausentándose este príncipe a las conquistas de Lérida y Fraga, volvieron a sitiarla los moros, y la pusieron en tal apuro, que resolvieron sus vecinos entregarla, haciendo primero lo que los de Numancia y Sagunto, que era quemar sus alhajas, matar las mujeres e hijos, y morir ellos peleando. Sabedoras de esto las mujeres, persuadieron a sus maridos que saliesen juntos a dar contra los moros, que ellas entre tanto defenderían los muros con todo género de armas, y aturdirían al enemigo con su estrépito. Salió felizmente el proyecto, y ahuyentaron a un enemigo a quien de otro modo era imposible arredrar. Noticioso el conde del ardid y valor de estas matronas, quiso honrarlas con algunos privilegios y distinciones, entre las cuales “primeramente ordenaron para conservación y memoria de tan grandiosa hazaña que todas las mujeres truxesen (trajesen) sobre su ropa una hacha de armas de carmesí o de grana, y aquella se pusiesen sobre una vestidura hecha como un escapulario de fraile lego o barbudo de la cartuja; a la cual ropa dieron nombre de pasatiempo, que parecía representar una sobrevesta militar.” Así refiere este hecho Francisco Martorell y Luna (a). Yo creo que sea este el primer escritor que haya dado noticia de aquel suceso. De él lo tomaron Garma (b), Moya (c), Estrada (d), Bonanni (e), 

(a) Historia de Tortosa, lib. I. cap. 26. 

(b) Adarga catalana, tom. I. capña, tom. . XI. 

(c) Rasgo heroico, página 532.

(d) Población general de Espa3. página 144.

(e) Ordinum equestr. et milit. catalog.

el autor de l'Histoire des ordres monastiques (a: Tom. VIII., pág. 425) y Mendo (b: De ordinibus militar. pág. 21). He dicho que Martorell es el primero que publicó esta noticia. Pero la verdad es que la tomó, como la mayor parte de lo que refiere en su libro, de los diálogos inéditos que compuso en catalán a mitad del siglo XVI D. Cristóbal Despuig, y dedicó a D. Francisco de Moncada, conde de Aytona, el cual depositó el original de esta obra en el archivo que tenía en Falset. Era Despuig (d'Es Puig) descendiente de Mosen Roger Despuig, uno de los cuatro caballeros que ganaron corona mural en la conquista de Tortosa. 

He visto copia de este MS., cuyo autor, en prueba de la verdad de este privilegio de la hacha, alega el testimonio del maestro Baltasar Sorio, que murió en esta ciudad en 1557 de edad de más de cien años, el cual le aseguró que cuando vino joven a Tortosa había visto algunos de estos escapularios del hacha en casa del arcediano mayor Esteban Garret (Stephanus Garreto), aunque ya entonces no se usaban; y que le contó Francisca Despuig que en sus primeros años estaban todavía en uso. Por donde conjeturo que duró esta costumbre hasta principios del siglo XV.

Este es el único documento alegado hasta nuestros días en prueba de aquel hecho  puesto en duda por algunos historiadores, no habiendo por otra parte documento auténtico de concesión o privilegio, y callando la ciudad cosa tan gloriosa cuando pidió a Felipe IV en premio de su fidelidad algunas gracias hacia la mitad del siglo XVII.  Tampoco hizo mención de ello el mismo rey en el privilegio que dice así: “Habiéndonos presentado nuestra fidelísima y exemplar ciudad de Tortosa que las mujeres (pone mugeres) de ella procedieron en la ocasión del sitio con mucho valor y afecto a mi servicio, y particularmente salieron a la campaña para conducir dentro (de) la ciudad las faginas (fajinas; fajo; feix) que los ciudadanos cortaban para la fortificación, y trabajaron con igual amor y cuidado en llevar cestones de tierra para levantar las fortificaciones, asistiendo a las facciones con tanto riesgo y peligro como los soldados más valerosos, y que de las casas y hacienda llevaron muchas veces que comer a las murallas para los soldados, porque no las desamparasen: suplicándonos que en consideración de esto seamos servido hacerles merces a dichas mujeres de concederles franqueza de los derechos de general y bolla (bula, sello) de todo género de vestidos así de seda y lana, como de lino que compraren o entraren en dicha ciudad para el uso de ellas, así para las que hoy son, como las que serán perpetuamente; y teniendo presente lo expresado, de que nos ha constado por relación del obispo de aquella ciudad, y deseando dar muestras de nuestra gratitud, hemos condescendido con la petición de la ciudad; y en su virtud &c.” 

A pesar de este silencio, que hace gran fuerza según las reglas de crítica, tengo por cierto el establecimiento de este distintivo del hacha, y su uso hasta el tiempo que he dicho. En prueba de ello bastará advertir que de las ruinas del antiguo cementerio de esta iglesia, del cual hablé en mi carta anterior, se han sacado algunos sepulcros donde está de relieve el hacha. Y como este cementerio servía ya en el siglo XII, se ve que estuvo en uso esta insignia, pues se esculpía aún en el sepulcro. Y que estas no fuesen armas de familia, sino cosa pública lo prueba la antigua piedra que se conserva en el claustro de esta catedral en el ángulo inmediato a la capilla que llaman de Santa Candia, de la cual es copia el adjunto dibujo, mal limado, pero exacto en sus dimensiones y figuras, menos los adornos de los ángulos, cuya pintura apenas se percibe en el original; pero vienen a ser los de la copia poco más o menos. Esta piedra contiene tres óvalos y en ellos tres escudos, en cuya explicación será preciso detenernos un poco. El primer óvalo pintado de un bermellón fuerte, tiene un escudo en campo dorado, y en él una torre de relieve con una puerta, dos ventanas, y cinco almenas: el cuerpo de la torre es bronceado, y los claros de puertas, ventanas y almenas dorados. Comparado este escudo con los que quedan en los edificios del tiempo de la conquista, se ve que son las armas de la ciudad, las cuales fueron dadas por el conde conquistador en muestra de la firmeza de sus moradores. D. Antonio de Moya en el lugar citado dice que "timbraron (sus armas) con una imagen de nuestra señora y una letra que dice: ampáranos a la sombra de tus alas.” Mas esto es posterior; porque las costumbres generales de Tortosa, hechas en 1277 (Tit.: Escriva de la Cort), hablando de las cartas o instrumentos públicos, y del sello que en ellos se debía poner, dicen: E devense segeylar ab lo segeyl de la ciutat, en lo qual segeyl ha una figura de torre, e es avironada daytals letres, ço es á saber: + Sigillum universitatis Dertusae; e ha en la forma del segeyl una torre ab IIII merlets, e una porta, e dues finestres. 

Donde se ve que este escudo, de que hablamos, fue hecho cuando la ciudad sólo ponía en su sello la torre sin añadidura de imagen, ni letrero, ni tampoco corona, ni palma, lo cual les concedió Felipe IV en 1654. El segundo óvalo tiene pintada la imagen de nuestra Señora, cuyos contornos se han sacado bien en la copia: ya ves que representa a María Santísima sentada; y que no teniendo alusión alguna a la entrega de la cinta, no puede corresponder a insignias de armas seculares, pero cuadra perfectamente con el sello que usaba en lo antiguo este cabildo, el cual he visto en algunos documentos; aunque no he podido averiguar el tiempo en que se comenzó a representar en él la imagen de nuestra Señora en pie como ahora. Tenemos pues que estos dos escudos pertenecen al orden público y al cuerpo secular y eclesiástico de la ciudad, y que por consiguiente no es piedra tocante a familia particular. Siendo pues el tercer escudo que representa el hacha, cortado en la misma piedra, es forzoso decir que pertenece también al orden público, y que es insignia de una cosa común a la ciudad; y yo no hallo a qué pueda aludir sino es a esto que decimos del hacha.

Y para que veas que esta conjetura no es arbitraria, es de saber, que el lugar donde se halla la piedra, estuvo destinado en el siglo XIII para celebrar las juntas del consejo general. En el archivo de esta ciudad (Cax. commune III. num. 8.) se halla un acuerdo hecho sobre un pleyto que pendía ante el arzobispo de Tarragona en el año 1262, y dice que se hizo en les claustres de la seu. En las costumbres impresas de Tortosa (Tit. del quint, e de les penes, se dice lo siguiente: E es a saber atressi, que nuyl ban, ne nuyl establiment no val re, si cridat no es; ne hom no es tengut quel seguesca, nen cau en pena, que posada hi sie; exceptat aquel ban e establiment, que es feyt en la claustra, appeylat consell publicament en la claustra, axi com es costum; car aquests axi feyts nols cal cridar. Es de notar que estas costumbres, aunque no son establecidas por el conde D. Ramón, como equivocadamente dijo Martorell, son respetables por su antigüedad, como fijadas en el año de 1277 por el obispo D. Arnaldo de Jardino, y otros jueces árbitros, de lo cual se habló en el episcopologio (a).

(a) En el principio del libro de les costums de Tortosa se lee lo siguiente: 

"Aci comensen les costums generals de la ciutat de Tortosa, novament imprimides, feelment ab son original comprovades. En nom de Jhesu Christ, Amen. Com en la ciutat de Tortosa fossen moltes costumes meses en escrit per los ciutadans, de les quals aquells ciutadans deyen que devien usar, la senyoria a ells aço contrastan; fo feyt compromes en lonrat Pare Narnau (En Arnau, N'Arnau), per la gracia de Deu bisbe de Tortosa, et en maestre Ramon de Besuldo, artiache (archidiácono, ardiaca) de Tarantona en la esglesia de Leyda, y maestre Domingo de Terol....los dits arbitres donaren a les parts les costumes declarades segons que en aquest libre son escrites e posades." 

Al fin se halla la nota siguiente:

“A llahor de nostre senyor Deu Jhesu Christ, es estat acabat lo present libre dels costums de la insigne ciutat de Tortosa, estampat en la matexa ciutat per maestre Arnaud Guillem de Mont pessat: essent procuradors, los magnifichs mossen P. Johan Sebil, mossen Pau Cerda, e mossen Benet Granell: ab recognicio e correctio del magnifich Micer Johan Amich, doctor en quascundret (quascun dret), ciutada de dita ciutat. Lo primer dia de Febrer del any de la Nativitat de nostre senyor M.D.XXXIX.” 

Y en el lugar citado se dice que ya entonces era costumbre el juntar consejo general en el claustro de la seo. Continuaba esta misma práctica en el siglo XIV; pues en el manual de deliberaciones de los años 1339 hasta el 42 se hallan los artículos siguientes: 

Item Dissapte a XXVI. jornsants del mes de Juyn (Juny) ffon capitol tengut, lo qual se tench en lo capitol de la seu, a requesta del honrat en Christo Pare, et senyor en Berenguer, per la gracia de Deu bisbe de Tortosa... E fo aqui lo senyor bisbe, et lartiacha major, et degua (degá o degà : decano, deán). = Item lo diumenge apres sequent len dema de la dita festa de Sent Johan fon justat capitol en la claustra de la seu &c. De lo cual se infiere que la claustra de la seu era uno de los lugares designados para convocación del consejo general, así como he hallado que otros se tenían en la cort, y también en lo monestir dels frares menors (el monasterio de los frailes menores; frare : frater : flare: fraile: hermano ). Probablemente se tendrían en la catedral los que fuesen a requisición del clero, o en los que debiese asistir el obispo, de suerte que no hay repugnancia en entender que la dicha piedra debió ponerse donde está, para autorizar y calificar más el lugar destinado a unos actos públicos y solemnes a que concurrían los brazos eclesiástico y civil. Y como por esta razón la piedra debe reputarse por un monumento perteneciente al orden público, también debe ser tenido por tal el escudo de la hacha en significación del estado noble o militar. 

Porque aunque no consta que esta divisa lo fuese del valor de las mujeres con exclusión de los hombres, y aunque pudo suceder que fuese en general figura del valor con que se defendieron los de Tortosa; tengo por muy verosímil lo que se dice que fue concedido a las mujeres. Porque como Plinio supone (Lib. VII. cap. 56.) que la  amazona Pentesilea fue la inventora de la hacha, y de aquí los poetas llamaron securigeras a las amazonas, esto es, armadas con segures; parece que el haber escogido esta señal del valor fue con relación a las mujeres, a las cuales llaman todavía aquí las amazonas.

De esto mismo se infiere la equivocación que padeció Mendo (de ordin. milit.) diciendo: militiam formavit, dictam de la hacha, quia in capite gestabant purpuream facis formam. Porque facis significa antorcha (*); y en todo caso debía decir falcis. 

(*: he leído atxa : arma aquí: https://historia-aragon.blogspot.com/2019/11/sumaria-contra-conde-urgel.html : “Hanhi jaquit una atxa et una daga et un roçi:”)

Mas ni aun eso cabe, porque falx es un instrumento corvo de labranza (falce, falz, fals, falç), que llamamos hoz. Así que la hacha es securis, instrumento militar; la cual era de gules, como dice Garma, esto es, de color rojo, pintada o dibujada sobre un pañuelo, o como escapulario pequeño, que llamaban pasatemps. Por la alusión que dice esta palabra a la latina pastinum, que significa como azadón, juzgó un erudito de esta ciudad que la figura de la hacha no debe ser como se pinta, sino de labranza; y que así no debe llamarse hacha de desarmar sino de desermar, esto es, de hacer culto (cultivar) un terreno yermo. Mas contra los monumentos alegados, nada vale esta conjetura; porque aun cuando las mujeres se presentasen en las murallas armadas de los instrumentos de labranza para ahuyentar con su estrépito a los moros, que es lo más que pudiera concederse; siempre será verdad que esta distinción se les concedió en atención a su valor y para memoria de él; y nadie dirá que el valor se simbolice con un azadón. La figura de la hacha como la pintan los que tratan de las órdenes militares es más pequeña y menos corva que la que muestra esta piedra; también la pintan perpendicular y no inclinada como aquí; pero estas son pequeñas variedades, y de todos modos es instrumento militar. (fasces; fascismo)

Con todo cuidado no he dicho orden de la hacha, ni la tengo por tal, aunque los italianos, franceses y españoles le dan este nombre de común acuerdo. Porque ni se dio carta de fundación, ni estatutos, ni cosa semejante; sino que esto era sólo como una divisa o insignia para conservar la memoria de un hecho, que no deja de ser glorioso para el sexô y para esta ciudad. 

Y porque ya estoy para marchar de Tortosa, quiero hacer una breve rebusca de mis apuntaciones, y descargar la memoria de muchas especies sueltas, que perecen con el tiempo, y son dignas de conservarse por varios respetos. 

Tal es la biblioteca de esta santa iglesia, la cual ha desmerecido mucho desde que la dejó el doctor D. Jayme Pascual, canónigo premonstratense y ex-abad del monasterio del Belpuig de las Avellanas. Quejóse al capítulo este docto catalán de lo olvidados y maltratados que se hallaban los muchos y exquisitos libros que hay en ella; pero a lo menos tuvo el consuelo de verlos colocados en su estantería. Ahora aun esto falta, porque hay montones de ellos tirados por el suelo y sobre las mesas, llenos de polvo, y comidos gran parte de las goteras. No faltan en la iglesia individuos doctos capaces de remediar este daño; pero les acobarda lo vasto de la empresa. 

¿Cuánto más a mí, que tengo el tiempo limitado y necesidad de emplearle en otras cosas? Aun por fortuna topé con algo bueno, y de esto hablaré. Dejando aparte una buena porción de libros corales antiguos y algunos breviarios, misales, ordinaciones, martirologios, y otros códices litúrgicos; se compone esta biblioteca de MSS., casi todos en vitela, la mayor parte del siglo XIV. Entre ellos examiné, no sin trabajo, los siguientes. = Casi todas las obras de Santo Tomás de Aquino, escritas muchas de ellas viviendo aún el santo doctor, o cuando menos antes de su canonización. = Milleloquium ex operibus S. Augustini: su autor Fr. Bartolomé de Urbino, agustiniano, y obispo de Urbino hacia los años 1350. Creo que se imprimió después en León a mediados del siglo XVI. = Expositio magistri Galterii Anglici rev. doctoris in sacrâ theologiâ super libros physicorum. = Fr. Petri de Altarrabia ord. min. commentar. in I. sentent. = Philosophia ultima mag. Guillelmi de Conchis. = Moralitates super libros Metamorphoseon à Fr. Thoma de Anglia ord. praed. vol. fol. men. al fin dice: Scriptus fuit hic liber Ilerdae X Augusti 1430 à Gundisalvo Riquexo. = Biblia metricè exarata, cuyo autor me es desconocido, aunque al pronto me pareció la de Pedro de Riga, que había visto en Valencia; mas le falta el prólogo, y no pude certificarme de esto. 

= Rationale divinorum officiorum, vol. fol. saec. XV = Constitutiones sinodales dioeces. Nemau. MS. en papel en 8.° de fines del siglo XIV. = Quaestionum LXV dialogus, Orosii percontantis, et Augustini respondentis. vol. 8.° MS. saec. XII, = Ovidii Metamorphoseon libri, MS. 4.° prolongado como del siglo XIII, con muchas notas marginales posteriores. = Horatii opera, MS. 8.° vit. saecul. XIV, muy maltratado = Del mismo tiempo son, Lucani opera, Terentii comediae, es a saber, Andria, Eunuchus, Eavtontimorumenon, Adelphi, y no más: Macrobii, et Sallustii opera, todos en 8.° = En un vol. del mismo tamaño y tiempo están, Notitia artis metricae Bedae praesbyteri, Sedulii opera, y un fragmento artis grammaticae Donati. = Otro igual contiene los epigramas de S. Próspero, y la summa dictaminis breviter et artificiosè composita per mag. Laurentium Lombardum, juxta stilum romanae ecclesiae, et consuetudinem modernorum. 

Por esta muestra colegirás lo demás que queda allí y el gusto que reinaba en los que recogieron la biblioteca, la cual no he podido registrar toda por varia causas que no es necesario decir aquí. También me han dado una noticia tipográfica, que merece toda la atención de los aficionados a este ramo de erudición; y es de un libro impreso en Tortosa el año 1477, cuyo título es: Rudimenta grammaticae Nicolai Perotti, archiepiscopi Sipontini. La nota del impresor al fin dice así: JHESUS. Praesens hujus grammaticae opus magnum praeclarumque Dertusiae imprcesum per magistrum Petrum Brun Gebennis genitum, et Nicolaum Spindeler de Cruickari germanum, anno Christianae salutis M.CCCC.LXXVII. die verò XVI. mensis Junii finem perfectum feliciter sumpsit. DEO GRATIAS. No creo que deba entenderse esto de imprenta permanente en Tortosa, sino de las ambulantes con que los artistas alemanes corrían nuestra península buscando la ganancia correspondiente a su habilidad y a un invento tan útil a la literatura. Con esto concluyo las noticias de Tortosa, de donde partiré uno de estos días, muy reconocido a la franqueza, e ilustración con que me han honrado muchos sujetos doctos de esta ciudad, señaladamente los señores canónigos D. Bernardo Oliván, D. Francisco Llobet, D. Jayme Barcalli,  D. Josef Roset, doctoral, D. Juan Navas, D. Juan Bautista Peña, penitenciario, y D. Luis García Conde, tesorero, presidente del cabildo. También soy deudor al abogado D. Josef Pinyol y al erudito D. Fernando Navarro, que después de sus viajes por las cortes y buena parte del África, y de haber adquirido en ellos gran pericia en las lenguas orientales, disfruta en el retiro de una amenísima granja de la copiosa y selecta biblioteca que heredó de su tío D. N. Navarro, prior mayor de esta iglesia. Iguales auxilios espero hallar en Tarragona y otras iglesias, porque efectivamente brilla en los españoles más de lo que creen los extranjeros el amor a la literatura y a las bellas artes. A Dios. Tortosa &c. 

CARTA XLII. Inscripciones romanas y otras de Tortosa.

CARTA XLII.  

Inscripciones romanas y otras de Tortosa. 

Mi querido hermano: Habiendo reconocido las antigüedades seculares que se conservan en varios parajes de esta ciudad, he copiado las inscripciones romanas en el estado en que se hallan. Omito algunas de ellas que han publicado los historiadores; sólo copio las inéditas, o las que ofrecen alguna dificultad particular, que son las siguientes: 

En la esquina frente de la casa de ayuntamiento se hallan cinco inscripciones. 

I.

THEOPOMPO 

SEVIRO AUG. PRIM 

AEDILICI IURIS 

IN PERPETUUM 

Si este Theopompo, que suena aquí con los honores edilicios y presidencia o primacía del sevirato, es el mismo cuya inscripción sepulcral, que existe en Tarragona, publicó Finestres en su Silloge inscrip. Rom., lo veremos en llegando allá. 


II. 

MERCVRIO 

AVG. 

SACRUM 

P. CORNELIVS

FRONTINVS

SEVIR AVG 

En la copia que publicó el M. Risco, sacada por D. Francisco Pérez Bayer, se omite la primera linea Mercurio, y al fin se añade otra con estas siglas P. S. F. C. Me asegura el erudito canónigo. D. Jayme Barcalli que estas últimas se hallan verdaderamente en la piedra, cubiertas con mortero, figurando un bocelete correspondiente al de los otros lados, como lo estaba antes la primera linea Mercurio cuando la copió Bayer. Por ella se ve que no era dedicatoria a Augusto, sino a Mercurio, protector del comercio, que tanto florecía en esta ciudad con la proporción que ofrecen el mar y el río Ebro

III.

M. PORCIO M... 

TERENTIA... 

HVIC VNIVERSVS...

AEDILICIOS ET DU... 

RALES HONOR. DE... 

M. PORCIVS THE OP... 

PATER 

Esta creo que es inédita; conjeturo que en la cuarta y quinta linea dirá et duumvirales honores detulit; con lo cual queda completo y llano el sentido. 


IV. 

IMP. CAES. DIVI

HADRIANI FIL

DIVI TRAIAN PATRN

DIVI NERVAE PROÑ

T. AELIO HADRIANO 

ANTONINO A. G. PIO 

TR. POT. COS. DES. II (2 con linea encima) 

R. P. DERTOS 

CVRANTE LEGATO 

M. BAEBIO CRASSO F 

LEGATIONE GRATUIT 

Con estas cuatro piedras romanas que se hallan juntas en el dicho lugar, hacen un gracioso contraste dos del siglo XII, que dicen: IIII.  cal. Junii anno MCXCVIII. Arnaldus Garidelli fecit facere totas istas hedificationes. = S...num Arnaldi qui hoc totum scripsit per picapetras, qui hoc operavit. 

En el castillo principal de esta ciudad en la escalerilla del cuarto del Gobernador se halla la siguiente inscripción, tal cual va aquí sin quitar ni poner. 

PANIIIEOTVTELAE 

OBLEGATIONE SIN 

CONCILIO P H C 

APVIANIC... NVN 

AVG. P.ROSPERE 

G. S... AS 

M.................IEN

Finestres y Bayer leyeron así: Pani Deo Tutelae ob legationes in concilio P. H. C. aput Anicienum aug. prospere gestas M... En el tomo 42 de la España Sagrada verás la dificultad que hay en leer aput Anicienum, a lo cual se añade la distancia entre ANIC 

y NVN, en que ciertamente caben más letras que la IE que se suple. Por otra parte 

observo que la primera linea está bien conservada, y no hay arbitrio para poderse leer Deo. Si valen conjeturas, habiendo en la I que sigue al PAN algún vestigio en la izquierda de haber sido T, con las otras dos II que siguen pudieron indicar H, y así se leerá PANTHEO; aunque ni esto me satisface; pero de todos modos allí no dice DEO. 

En un torreón del castillo a la parte de levante se halla esta sepulcral: 

D. M. 

AV. CAECILI 

CVBICVLARI 

PEREGRE 

DEFVNCTI 

PORCIA 

EVPHROSY 

NE. MARITO 

OPTIMO 

POSVIT 

Esta piedra tiene en lo alto un barco de relieve, con que sin duda se expresó alguna expedición naval del Cecilio, o algún cargo que tuviese en la marina, o lo más cierto el comercio de Tortosa. 

En la casa de D. Juan Bautista Navás, canónigo, a espaldas de la catedral, se halla la siguiente: 

DM 

L. NVMISIVS LI

BERALIS. MIL.

CL. PR. RAVENN 

III. MART. STIP. XIII

NAT. CVRSICAN

M. DIDIVS. POL

IO. HERES. TE CoM

MANNVP. TE. GELLIA

EXCITATA... 

Otras dos piedras romanas quedan en la pared exterior de la catedral que mira a norte; las omito por hallarlas bien copiadas en el tom. 42 de la España Sagrada

Al lado de estas memorias romanas merece ponerse una inscripción que queda de los árabes, muy bien conservada. Se halla en la pared exterior de la catedral a espaldas de la sacristía; los caracteres son cúficos de relieve. Dióme de ella la copia que incluyo D. Fernando Navarro, docto y versado en las lenguas orientales, que fue el primero que la interpretó. Otra versión y declaración hizo de ella el erudito D. Miguel Casiri, que es la siguiente: "Omitiendo las dicciones de esta inscripción arábigo-cúfica, ininteligibles y confusas por sus letras equívocas, trocadas y desfiguradas, explicaré solamente las dicciones legibles más claras, que dicen como se sigue: En el nombre de Dios misericordioso y piadoso. Mandó hacer esta torre para las horas de las oraciones el rey Abdelrrahman, que se acabó y perfeccionó en el año 333 de la egira (que corresponde al año 944 de Cristo) del reinado de Abdelrrahman, que Dios le prospere, ayude, y le sea propicio. La última linea dice así: El artífice de esta es Abdallah Ben Klaib. = Nota. 

= La torre llamada por los árabes Almadena, y vulgarmente Almudena, sirve para subir por ella el sacristán a intimar al pueblo las horas de las cinco oraciones, mandadas por la ley mahometana por el día y por la noche. Este rey Abdelrrahman, el III.° de este nombre, de la Dinastía de Beniomia, empezó a reinar el año de la egira 300, y reinó hasta 350 de la misma egira. Véase mi Biblioth. Arabico - Hisp. Escurial (biblioteca arábico hispánica escurialense, documentos de la biblioteca real de San Lorenzo del Escorial). tom. II. p. 201. = Esta inscripción arábico-cúfica es útil para la cronología e historia de España, como también para la serie de sus reyes árabes que han dominado en ella. = Madrid a 20 de Noviembre de 1788. = D. Miguel Casiri, bibliotecario de S. M." Hasta aquí Casiri. Otros eruditos en esta clase de inscripciones han creído que en la presente no se hace mención de torre para oraciones, sino de baños, o noria para riego (sínia, sénia, senia), o de casa para los artífices de las naves, de cuya opinión es nuestro docto académico D. Josef Antonio Conde. Para dejar ilustrado este documento, pondré su reducción a las letras árabes corrientes, y su traducción literal hecha por el mismo: 

(N. E. Insertar en el blog la imagen con los caracteres árabes)

En nombre de Dios clemente y misericordioso: mandónos edificar esta casa para los artífices de las naves Abdala Abderrahman, príncipe de los fieles, favorézcale Dios: y fue acabada la obra por diligencia de su alcayde y siervo Abderrahman, hijo de Muhamad, con ayuda de Dios y su auxilio en año 333, y lo escribió Abdala ben Colaib. 

Otra piedra hay al lado de la puerta de la iglesia llamada del Temple, que sólo contiene la memoria del día en que la orden de S. Juan de Malta tomó posesión de los bienes de los templarios. La copiaré sin embargo aquí: En lan de MCCCXVII (1317). II. dies a la entrada del mes de Deembre lo honrat frare Marti Periz Doros, castela Damposta (castellano de Amposta, castellán, castellá, castlá, castlán, catalán, châtelain, etc) entra en posesio ponament (*) de la casa, dels bens, qui foren del orde del temple en la ciutat de Tortosa; e puys apres de tots los altres bens en Arago, e en Catalunya (a). 

Los templarios habían sido extinguidos en el concilio Vienense de 1311. Algunas otras inscripciones quedan por esta ciudad de los siglos XIV y XV, singularmente en el claustro de la catedral, de que acaso convendrá hacer uso en adelante. 

Nada más por hoy. A Dios. Tortosa &c. 


(a) “En el año MCCCXVII (1317) a 2 de Diciembre el honorable Fr. Martín Periz Doros, Castellán de Amposta, entró en pacífica posesión de la casa y de los bienes que fueron de la orden del temple en la ciudad de Tortosa; y luego después de todos los otros bienes en Aragón y en Cataluña.”  

(*: plenament ? errata, o abreviatura de pacíficament? como traduce en la nota a)

CARTA XLI. Reliquias de la catedral de Tortosa.

CARTA XLI. 

Reliquias de la catedral de Tortosa: memoria de la santa Cinta: su fiesta y oficio: costumbre de llevarse a la corte, cuando comenzó: carta de la reina Doña Margarita, dando varias reliquias: custodias nueva y vieja: pila del papa Luna. 

Mi querido hermano: Entre las reliquias insignes que posee esta catedral, debo hablar primeramente de la santa Cinta o Cíngulo de María Santísima, alhaja muy conocida en todo el orbe, y autorizada con la piedad de nuestros católicos monarcas. Lo que acerca de esto se cree es que en el siglo XII, poco después de edificada esta iglesia, por la noche antes de la hora de maitines apareció María Santísima a un sacerdote, y le dejó sobre el altar mayor esta reliquia. Mas no se sabe el año fijo de esta aparición, ni tampoco el nombre del sacerdote, cosa bien extraña.

Consérvase de aquel tiempo una pila de agua bendita circular como de dos tercias de diámetro, cavada a manera de concha en piedra muy firme; de la cual dicen que tomó agua bendita María Santísima al entrar en la iglesia la noche de la aparición, y aún por esta razón los que entran en la iglesia por el claustro donde está rodeada de verjas de hierro, no se sirven mutuamente el agua bendita, sino que cada uno por devoción la toma por su mano. Sobre la pila están escritos estos dísticos.

Cingula virgo parens praestanti munere donat 

Dertusae templo: pignus amoris adest. 

Angelicis comitata choris, sociataque Petro,  

Pauloque eximiis, culmina bina poli: 

Sacra manus tingit latices, lustratibus undis 

Lustrat, et illustrat quae tetigere manus. 

Foelices limphae signantes flumine frontem, 

Virginis attactu purior unda fluet. 

La memoria más antigua que se conserva de esta reliquia es la noticia que da de ella, un inventario antiguo de la sacristía, recibido por Pedro Sunyol, notario, en el año 1354, en el cual con fecha de 27 de Febrero se lee lo siguiente; item la RECINTA de Madona Santa María, la qual esté en una caxeta de fust: es la RECINTA de seda. Continuando el inventario hasta el año 1370 se halla sobre lo mismo lo siguiente: item hi ha dat en Bernat Berca dues caxetes de cipres totes pintades a senyal seu, la una dins laltra, et quascuna ab sa clau, que y estia la CORREJA de Madona Santa Maria, la qual hi es ja. 

Otra memoria del mismo tiempo queda en la constitución que hizo en 1363 el arcediano Miguel Cirera, vicario general, del obispo de Tortosa D. Jayme de Aragón, con el título: quòd vestimenta seu panni ecclesiae non praestentur, nec reliquiae monstrentur: en la cual se ordena lo siguiente: “Ceterum cùm in concilio generali habeatur, quòd reliquiae passim extra capsam ostendi non debeant; de consensu praedicti capituli statuimus, quòd reliquiae praedictae ecclesiae Dertusae de cetero passim non ostendantur; sed, si subthesaurario visum fuerit ipsas deberi vel posse ostendi aliquibus, illas per se ipsum, vel alium canonicum ipsius ecclesiae honorificè, et cum superpellicio, et stolâ in collo, et cum cereo accenso ostendat. Si verò capellanus sacristiae seu alius de praedictis dictas reliquias ostenderit quomodocumque seu qualitercumque alicui, ipso facto sententiam excommunicationis se noverint incursurum. Excepto quod CORRIGIAM B. Mariae possit de licentiâ dicti subthesaurarii portare in capsâ ad parterias; quam capsam cum CORRIGIA portet secretò sub gramaciâ, seu tabargio; et ducat secum superpellicium et stolam, et cùm erit in domo ubi erunt dictae parteriae, induat superpellicium, et ponat stolam in collo cum duobus cereis accensis, quos habeant habere ipsae parteriae, ostendat ipsam capsam, a qua non abstrahat dictam CORRIGIAM. Et ponat si voluerit ipsam capsam super dictas parterias, et cùm per pausam ibi steterit, redeat cum dicta capsâ secretè prout ivit, et portavit ad parterias supradictas.” 

Andando el tiempo se estableció fiesta peculiar de esta reliquia; la cual comenzó en el año 1509 con la dotación de ochenta libras que hizo el Dr. D. Francisco Vicent, prior de Tarragona y natural de Tortosa. Suyo es también el oficio propio que se rezó antes de la reforma de S. Pío V, el cual se ingirió en los breviarios impresos, y hallarás en la historia de Tortosa que publicó Martorell. A instancias del cardenal Portocarrero concedió la Congregación de Ritos que se volviese a celebrar la fiesta en el mismo día que antes, esto es, en la dom. II de Octubre, y que hasta haber examinado la historia de la Cinta, se rezase el oficio S. Mariae ad Nives, con las lecciones del II noct. de Octava Nativitatis B. M. Fue esto a 21 de Noviembre de 1671. Con las instancias del obispo y clero, repetidas hacia los años 1725, determinó la S. Congregación Pro concessione officii B. Virginis, ut in die ad Nives, pro II. dom. Octob. cum lectionibus propriis II. noct. desumendis a sancto patre, arbitrio eminentissimi ponentis. Tomáronse de Santo Tomas de Villanueva, Conc. I. de Assumpt. Virg., por ser acomodadas a esta solemnidad, y hablar allí de vestidos y cíngulo &c. Acerca de la verdad de la tradición de esta iglesia, habla así el papel que se imprimió en Roma con esta ocasión: Adductis....documentis super veritate historiae prodigiosae delationis cinguli, quamvis eam lectionibus propriis recitari eminentissimi patres non admisserint, adhuc plenissime 

quoad mox dietam historiam comprobata extitit pía et inconcussa illorum populorum traditio, quae omnem meretur animadversionem. 

La costumbre de llevarse esta reliquia a nuestra corte para los partos de las reinas comenzó en los tiempos de Felipe IV. A lo menos en este archivo no hay otra memoria de esto anterior al año 1629. Consérvanse también varias cartas de reyes, y algunas donaciones hechas a la iglesia con este motivo. La reliquia se colocó en la capilla actual hacia los años 1725, por lo menos de este año es la carta en que Felipe V dio su consentimiento para ello, y para que se escribiese su nombre en el libro de la cofradía de la santa Cinta, que es numerosa, y goza de muchos privilegios. El relicario es cuadrado, y forma una sigla con el nombre de María; hízose a expensas del obispo de esta iglesia D. Luis Tena. Por entre los claros se ve que la cinta es de seda y tejida como red; su longitud dicen ser de doce palmos. Una pequeña porción se guarda en la sacristía en otro relicario para comodidad de los fieles que desean venerarla.

Otra reliquia insigne conserva esta catedral, que es la cabeza de Santa Candia, una de las compañeras de Santa Úrsula, la cual envió el arzobispo de Colonia Guillermo en 1351, como se lee en las lecciones de esta fiesta, que se hallan en los breviarios antiguos. Depositóse en el aula capitular, la cual desde entonces se llama capilla de Santa Candia, como antes se intitulase de S. Juan, según he hallado en algunas memorias de este archivo. Recientemente, con motivo del tránsito de los reyes nuestros señores por esta ciudad en 1802, se trasladó el altar de esta santa mártir dentro de la iglesia. La cabeza está en el relicario. En las mismas lecciones de Santa Candia se hace memoria del martirio de Santa Córdula con las circunstancias que verás en la copia que de ellas incluyo. Se rezan las mismas en el día; pero se ha quitado la expresión sicque voluntariè pro fide suscipiens mortem. Otra cabeza de una de las santas compañeras de Santa Úrsula regaló a esta iglesia la reina Doña Margarita, viuda del rey de Aragón D. Martín. Dio con ella varias reliquias, entre las cuales expresa hun cap de Sant Eulali martir, qui fon cognatus de un rey de Spania. He copiado la carta original lemosina, fecha en esta ciudad a 22 de Mayo de 1420. También he visto en el armario de reliquias un vaso que contiene un pedacito de mantel de la mesa en que comió Cristo en casa del Fariseo, otro de la sábana del sepulcro, otro de la toalla con que se enxugó (enjugó) las manos en el cenáculo; parece labrado en el siglo XV, y al pie está escrito Hoc tibi munus, Christe, offert archidiaconus iste, Stephanus de Garreto. Hay allí dos cofrecitos de madera con embutidos de marfil, que representan asuntos mitológicos o más bien ideales, con letreros árabes de carácter cúfico y dibujos graciosos. Todo ello indica que pudieron servir de deposito del Alcorán. Tienen poco más de una cuarta de elevación y dos no completas de largo. En otro relicario hay tres espinas de la corona del Señor: consérvase también un altar portátil con muchas divisiones y reliquias en ellas, que bien muestra ser del siglo XIV y alhaja de algún príncipe. Otras reliquias hay; mas no tienen tanta conexión con la historia eclesiástica. Los vasos en que están algunas de ellas depositadas, son de varias formas, según el tiempo en que se hicieron. La custodia para el día del Señor de dos cuerpos de orden corintio es de lo más arreglado al arte que allí se encuentra. Los artífices fueron Aloy Camanyes y su yerno Agustín Roda, natural de Tortosa. Se comenzó en 1626. Para hacer esta se deshizo la antigua, que comenzaron a trabajar en Valencia en 1382 los plateros Pedro de París de la parroquia de Santa Catarina, y Pedro Capellades, a los cuales en el mismo año se entregaron cien marcos de plata. Prometieron concluirla en dos años, mas no lo verificaron hasta el 1393, en que está fecha la apoca de 1179 libras y 6 sueldos del valor de la plata que en ello se empleó. Quedan memorias de varias donaciones del rey, obispo y cabildo para este objeto. Entre ellas recibieron dichos plateros a 10 de Enero de 1388 lapides desencastatos sequentes, qui encastari debent in hostiariâ reliquiarii, quod nos facimus, fabricamus, et operamur... et sunt ut sequitur numero septem: primo unum topasium, item unum maracde, item quatuor çafirs, inter magnos et parvos, item unum calçadoyne entallat.

Entrando en el templo por la puerta principal se halla en la primera capilla de mano derecha la pila bautismal que se trajo de Peñíscola, donde sirvió de taza de una fuente en los jardines del antipapa Luna. Es un octágono de piedra muy sólida con bajos relieves en la parte exterior, y entre ellos el escudo de sus armas, que era la luna con la tiara. También se guarda en la sacristía un pectoral suyo, compuesto de un ovalito lleno de reliquias, del cual salen al contorno varios rayos, a los cuales abraza por la parte inferior una media luna. Le he llamado pectoral, porque así le llaman aquí; mas seguramente no lo es, sino un relicario regalado por el mismo, como también lo es una cruz magnífica y construida con prolijidad, que tiene de elevación como unos tres palmos, y un cáliz de palmo y medio de alto, con el cráter cónico, que tiene de alto seis dedos y siete de diámetro: le acompaña una patena de un palmo de diámetro, cóncava en medio con algunas miniaturas, y este letrero al rededor: Jesus Christus Rex venit. Las más apreciables memorias que guarda esta iglesia de aquel hombre tan célebre, son las varias constituciones que hizo para su gobierno y el de otras catedrales; entre ellas está original la Constitutio magna in favorem fidei nostrae, et in opprobrium judaicae caecitatis. Nada más por hoy. Tortosa &c. 

In festo S. Candiae V. et M. ex brev. Ms. eccl. Dertus.

Lectio I. 

Cum ferox Hunnorum rabies ferarum more in undena Virginum millia desaeviret, easque telis, gladiis, et ensibus crudeliter trucidaret; virgo quaedam nomine Cordula humanum aliquid puellari conditione patiens, timore perterrita, in navi nocte illa se abscondit: sicque cum ceteris virginibus eadem die passa non fuit. 

II.

Mane autem facto in se rediens, et martyrii palmam, quam sodales acceperant amississe se dolens, de navis latibulo, quo se receperat, libens exiliit, et velut ovem à lupis trucidandam se pro Christi nomine militibus spontaneè obtulit. Quam velut christianam, et Christum constantissime profitentem, Hunni crudeliter occiderunt. Sicque voluntarie pro fide suscipiens mortem, cum palmâ martyrii ad ceterarum virginum pervenit societatem. 

III.

Cùm autem de ea, sicut de ceteris festum non fieret, eo quod cum aliis passa non fuisset, cuidam reclusae apparuit, monens ut sequenti die post festum virginum speciale de ipsâ fieret festum. 

IV. 

Diffusa autem inter fideles Christi erga sacras virgines devotione, multae ecclesiae per orbem de reliquiis earum obtinere conatae sunt; ut earum veneratione habere mererentur suffragia, quarum reliquiis piae religionis praestarent obsequia. Quod Dertusensis ecclesia studiosiùs devotiùsque peregit. 

V. 

Anno siquidem Domini M.CCC.LI. sexta Aprilis caput B. Candiae a Coloniensi archiepiscopo Guillelmo, viro utique insigni, eidem Dertusensi ecclesiae fuit concessum, et ad ipsam debitâ cum reverentiâ deportatum. Inter cetera autem, quae ipsius sacrae virginis intercessione Deus mirabiliter operatur, tactu capitis plurimi a dolore capitis et gutturis infirmitate, aliisque curantur languoribus, ad gloriam Dei omnipotentis, et honorem ipsius B. Candiae virginis. 

VI. 

Praecipuè autem inter cetera infirmitatum genera, quae meritis B. Candiae, tactu illius capitis curantur, sunt scropholae, quae in collo puerorum puellarumque saepe gignuntur: accepta insuper mensura capitis virginis, filo sive funiculo, et infirmantium circumdata collo, resolvuntur tumores, et languentes sospitate reddita liberantur. 

Propter quod alienigenarum concepta ad ipsam virginem devotione pro hujusmodi languore curando, ad habendam in funiculis mensuram capitis, circumponendumque languentium collis, frequentius mittitur; sicque infirmitas ipsa seu aegritudo curatur.