lunes, 24 de abril de 2023

APÉNDICE DE DOCUMENTOS. I. Statutum domini Antonii de Galiana, Episcopi Maioricen.,

APÉNDICE DE DOCUMENTOS.

I.

Statutum domini Antonii de Galiana, Episcopi Maioricen., super baptismo Judeorum ante tertium diem conversionis ipsorum ad fidem non perficiendo, anno MCCCLXXIII. (Vid. pág. 13)

Ex lib. comuni cur. episc. Maioric. de an. 1364 ad 1374.

In nomine Domini. Amen. Sacrorum canonum institutis liquido constat nemini Judeo vel Pagano ad credendum vim inferre. Cui enim vult Deus miseretur et quos vult indurat. Non enim tales inviti sunt salvandi, sed volentes ut integra sit forma iustitie; et ante dies viginti ad baptismi purgationem non admittantur, infra quos cathecumini ad sacri fontis renovationem concurrat, et ad simbolum Apostolorum spiritualiter doceantur. Contra quorum canonum sententiam nonnulli curati subito Judeos, Paganos ad sanctum baptismum admitant, decipientes verbum quo cavetur quod nulli cito manum imponas. Super quibus Judeorum aljamae Maioricen. crebra fuimus supplicatione pulsati pro observantia sacrorum canonum praedictorum. Nos igitur Antonius, miseratione divina Episcopus Maioricen., cupientes iusta petentibus assensum non denegare, et quod consuetudinis ususque longevi non sit vilis auctoritas, fecimus diligenter inquiri: et testimonio rectorum, vicariorum et aliorum curatorum, iuratorum concordantiam fuit compertum, quod Judeis pro sacro baptismo suscipiendo ad ecclesiam confugientibus, ante tres dies infra quos in articulis fidei catholicae instruebantur, dictum baptismi sacramentum non conferebatur: recogitantes si iracundiae, ebrietatis vel alterius criminis metu forsitan essent inducti seu provocati; quibus tribus diebus elapsis ad sacri fontis renovationem admitebantur in devotione perseverantes. Quamobrem attendentes consuetudinem legum optimam interpretem fore, praesenti constitutione irrefragabiliter perpetuo servatura ordinando mandamus quod nullus Judeus ad sanctum baptisma admitatur nisi post lapsum trium dierum, forma narrationis praedictae plenius observata. Et si quisquam curatorum, seu eorum loca tenentium, aut alius presbiter contrarium attemptare presumpserit, penas decem librarum fabricae ecclesiae Maioricen. aplicandarum, et excommunicationis incurrere volumus ipso facto. Datum Maiorice sub maioris nostri sigilli appensione, die prima mensis junii, anno a Nativitate Domini millesimo CCC.LXX tercio.

sábado, 22 de abril de 2023

CARTA CLIV. Por qué esta isla y reino se llamó en plural Maioricarum:

CARTA CLIV.

Por qué esta isla y reino se llamó en plural Maioricarum: cuándo comenzó su capital a llamarse Palma. Noticia de algunas de sus monedas después de la conquista. Su lonja o casa de contratación. Relox mallorquín: costumbre de contar separadamente las horas del día y de la noche. Qué era la campana de los ladrones: inscripción de una antigua del convento de Santo Domingo. Cómo se contaron los años en esta iglesia. Copia de las inscripciones hebreas que se hallan en dos cetros antiguos de la catedral. Noticia de algunos privilegios concedidos a los Judíos de Mallorca. Cartas inéditas de Fr. Bernardo Boil, ermitaño de Monserrate.

Mi querido hermano: Voy a hacer hoy un rebusco de cosas, u olvidadas o que no tuvieron lugar en los correos anteriores, y no por eso menos dignas de ser sabidas. Sea la primera el nombre de esta isla y ciudad. Y no hablo del tiempo de los Romanos y más arriba, de que no queda que añadir a lo ya sabido de todos, si no son algunas conjeturas que hacen ridícula a la historia y al historiador. Hablo de los tiempos de la conquista acá y por los documentos que nos quedan, en todos los cuales, así latinos como vulgares lemosines, siempre se nombra en plural insula Maioricarum, illa de Mallorques. Papebrochio (praefatione genealog., ad leges palatinas Jac. II Reg. Maioricarum. = Acta SS. mens. Jun., tom. III) juzga que se usó del plural por comprender este reino a la isla de Menorca. Mas esta razón no vale, porque también en Menorca se usó del plural, como entre otros documentos consta de la moneda que cité hablando de esta isla, en la cual se intitula Alfonso Rex Minoricarum. Es preciso, pues, apelar a otra solución, y a mí me parece que lo es el ser muchas las islas adyacentes a la principal, las cuales quisieron expresar con una sola palabra como partes de ella y pertenecientes a su jurisdicción, llamando a la primera insula Maioricarum. En plural se llaman los pueblos, v. gr. Mantuae Carpentanorum, Lutetiae Parisiorum, Valentiae Edetanorum. También plural las naciones, v. gr. Carlos, Rey de las Españas. = Ferdinandus Hispaniarum et Indiarum Rex, porque son muchas las Españas (citerior y ulterior. = Tarraconense Bética, Lusitana) y las Indias (oriental y occidental). = Dícense las dos Sicilias. = A este modo pudieron decirse las Mallorcas, o por considerar la isla dividida en septentrional y meridional, o por las islas adyacentes a ella. Si esto no es, no alcanzo otra cosa que pueda ser.

El nombre general de la isla lo fue también particular de la ciudad su capital, que siempre se llamó la ciudad de Mallorca hasta entrado el siglo XVII. Entonces con la manía común a todos los pueblos de afectar antigüedad, se introdujo llamarla Palma, creyendo que cerca de ella estuvo la llamada así por los Romanos. Mas a pesar de esta novedad, a cuya introducción coadyuvó mucho la Crónica de Dameto en los diplomas y cartas reales del año 1679, todavía se intitula esta ciudad Mallorca, como puede verse en el archivo real; y yo creo que siguió llamándose así años adelante y acaso hasta entrado el siglo XVIII.

Esta isla y reino de Mallorca careció de moneda propia desde su conquista hasta el año 1301. En cuantas escrituras de establecimientos, ventas y otras de esa clase he visto en todo ese tiempo se mencionan los dineros Melgoreses, macemutinas iucifias in auro, morabatinos bonos novos Alfonsinos in auro, bizantios boni et fini argenti. (Qui decem morabatini, dice una dotación de Nuño Sanç de 1239, et duae macemutinae faciunt decem et octo macemutinas): bizantiis bonae platae veteris et legalis Mirialmomenini: y así otras. Corrían también todas las monedas acuñadas ya en Valencia, con haber sido su conquista posterior a la de esta isla, y era la moneda más común con que se hacían todos los contratos.

Consolidado finalmente el gobierno del Rey Don Jaime II, puso en práctica este Príncipe la facultad que se había reservado, cuando juró ser feudatario del de Aragón, de acuñar moneda propia de este reino. Hízolo a instancias de los Jurados de esta universidad con escritura fecha a 23 de marzo de 1300 (1301), en la cual dice que la moneda que iba a acuñarse se llamaría reals dobles, e reals senars, e menuts e mallas, e reals dargent, cuyo valor, calidad y figuras explica con estas palabras que referiré a la letra, según la traducción lemosina que he visto en el archivo real de principios del siglo XV: "Los quals reyals doblencs sien per tots temps a lig de III diners, menys pugesa a argent fi. Tos diners de la dita moneda apellada dobles ixen a pes de XI sous per march. Los dits empero reyals senars o menuts sien en per tots temps a aquella matexa lig diners daquela matexa moneda menuda, ixens a pes de XXII sous per march. Mayas empero de la dita moneda sien per tots temps daquela matexa ley, les malles daquela moneda ixens a pes de XLIIII sous per march, XXIII mayas valen XII diners manuts. Los dits empero reyals dargent sien per tots temps de lig de XI diners per march, e quels dits diners dargent valen cascu dels XVI diners de rayals manuts. E en la una part de les dites monedes, totes sia cap de rey coronat, e en laltre part sia creu; e el bras de la creu de la part iusana sestena tro al subira cercle de les dites monedes...” Prosigue asegurando la perpetuidad de esta moneda, y mandando que todos los habitadores de Mallorca, poseedores de bienes en valor de X libras de reales o más, paguen al Rey y sus sucesores cada siete años por derecho de monedaje un morabatín de oro u ocho libras de reales de Mallorca. El mismo valor tenían aquí dichos morabatines en 1372.

Otra escritura hay allí mismo, fecha a 25 de abril de 1310, en que el mismo Rey jura y hace jurar a sus dos hijos Sancho y Fernando la observancia de la moneda de oro que acababa de acuñar, y que manda se llame reales de oro de Mallorca, cuya figura y valor explica de esta manera: "sien a ley de XXIII quirats e mig pres per fi e per pur aur de fluri qui es dit de XXIIII quirats; LX dels quals diners daur pesa I march de Malorqua. En una part daquel diner daur es entratayade la image nostre reyal seent en la cadira ab corona al cap, e tanent en la ma dreta emperi, e en la sinestra pom ab senyal de la honrade sobreposat: e entorn de la dita part ha aquest titol: Jacobus Dei gratia, Rex Maioric.; e en la dita part es format lo senyal de la Sancta Creu en esta manera +; e en torn de la dita part se ligen aquestes letres: Comes Rossilionis et Ceritaniae, et Dominus Montispessulani. E el bras de la Creu de la part devayl sesten tro al cercle de la dita moneda.”

Mas ¿cuál será el quilate de estas monedas? Por lo que pueda convenir allá va esta nota del libro de la fábrica de 1327: "a VIIII de març reebi del Senyor Dega XXIII ll., en les quals eren IIII reyals dor, estimats cascun a XXIII sous VI diners; e despesi los a XXV sous. Item hi havia XX croats estimats cascun a XV diners; e despesilos a XVIII diners.”

Sería inmenso individualizar las muchas alteraciones que sufrió aquí la moneda en los siglos inmediatos, y muy difícil dar una idea exacta de su valor y correspondencia a las usadas entonces en Aragón y Castilla, y mucho más a las modernas. Esta prolijidad, que sería muy útil, ni es propia de mi viaje ni del estado en que veo ahora mi salud, que en otras ciudades me ha permitido hacerlo en gran parte. Bástame llamar con esto la atención de estos naturales, que son los únicos que pueden ilustrar este y otros puntos de su historia patria con la comodidad y detenimiento que pide semejante trabajo. De las monedas actuales y su correspondencia a las de Castilla habló bien el autor de la Descripción de las islas Baleares, que se imprimió en Madrid hace pocos años.

De la lonja o casa de contratación de esta ciudad se me ofrece poco que decir después de la docta carta que Don Gaspar Melchor de Jovellanos escribió sobre su construcción y arquitectos, durante su destierro en esta isla, la cual se publicó de orden de su consulado en 1812. Lo principal que en ello hay es que se comenzó hacia el 1409 por la planta y bajo la dirección del arquitecto Mallorquín Guillermo Sagrera (de quien ya se habló en lo de la catedral), y como este hubiese pasado a Nápoles a la construcción del castillo de Castelnovo en el año 1448, entendieron en concluir los adornos de nuestro edificio un Miguel Sagrera, junto con Guillermo Villasolar. Es en efecto obra grandiosa y que en los adornos exteriores excede a la de igual clase de Valencia, y al salón antiguo de Barcelona, mas no en la elevación y elegancia interior, como lo dirá quien haya visto los tres edificios.

Jovellanos dijo con razón que antes de construirse esta lonja había, no sólo lonja para este comercio, sino para el de otros extranjeros. En el proceso original que conservan los PP. Capuchinos de esta ciudad, hecho en 1345 con motivo de los desórdenes que ocasionaron los afectos al último Rey de Mallorca, se mencionan en varios lugares muchas lonjas, aunque no se especifican. El Cronicón de Salzet menciona en 1403 la Lotja dels Placentins. También la tenían los Genoveses y todos los que de otras potencias residían aquí en gran número o tenían factorías y comercio crecido. Porque entonces era Mallorca respeto de las riquezas de Levante, lo que después fue Sevilla y ahora Cádiz respeto de las de América. Es sensible que este hermoso edificio, uno de los buenos que nos quedan del tiempo medio, ha sido desfigurado y en parte destruido con la fundición de cañones que se ha establecido en él, colocando en su ámbito los hornillos y agujereando las bóvedas, etc. Yo no juzgaré de la justicia o injusticia de esta disposición: sé que cuando se trata de servir a la patria todo se debe posponer a este objeto, mas también sé que había otros puntos en la isla mucho más cómodos para este objeto, atendidas todas sus operaciones. Otra curiosidad notable hay en esta ciudad que no quiero dejar intacta, ya que todos hablan de ella, naturales y extranjeros, cada cual como Dios le encamina. Hablo del reloj mallorquín que toca las horas del día desde la salida del sol, y las de la noche desde el ocaso del mismo, acomodándose, como se supone, en todas las estaciones a la altura del sol. Dice el vulgo que este reloj vino del Egipto o de Babilonia o de Jerusalén y qué sé yo qué más, añadiendo otras circunstancias maravillosas que excitan la compasión del que las oye. Algunas de ellas están bien impugnadas en los historiadores del país, los cuales quisiera yo que en lugar de dar tanta importancia a estos rumores hubieran dicho: primero, cuál es el artificio de este reloj para desengañar al vulgo, y segundo, que le llamasen su atención hacia lo que verdaderamente la merece, que es no el reloj, sino la causa porque se construyó de esta manera, es a saber, la costumbre de contar así las horas del día y de la noche. Y de ambas cosas voy a dar alguna idea.

El reloj, que es propio de la ciudad, está situado en una torre baja junto al convento de Santo Domingo y en lo que era su cementerio antiguo. Existía ya allí mismo en el año 1385, cuando según el Cronicón de Salcet se compró y colocó una campana para tocar las horas del día y de la noche. No se infiere de esto que estuviese ya entonces conocido el artificio de que el mismo reloj mueva el mazo de la campana y de las horas que corresponden. Mariana dice (lib. XIX, cap. 10) que este artificio no es anterior al año 1400. Sea de esto lo que fuere, que ahora no hace a cuento, la campana que hoy sirve para lo mismo se fundió en 1680, como se lee en ella misma entre las inscripciones ordinarias: Christus vincit, etc.; fugite partes, etc. Ave Maria, etc.

Este reloj es el único en que ahora se tocan las horas del modo que dije, siguiendo nuestra costumbre común los demás de la ciudad. Y ¿en qué consiste su artificio? ¿cómo está dispuesto, que sigue la altura del sol cualquiera que ella sea? Yo lo diré. Este reloj es como cualquiera otro. No hay más diferencia sino que la rueda en que están marcadas las horas, cuando los demás tienen doce horas, concluidas las cuales vuelve a tocar la una, este tiene catorce, que es el mayor número de horas que hay en las noches de diciembre y en los días de junio. Así, pues, el encargado del reloj todas las tardes al anochecer le da la cuerda necesaria para el número de horas que corresponden a aquella noche y no más, y en concluyéndose esta al amanecer se acabó el toque de horas, que regularmente no tocan entre día; y si tal quieren se le da cuerda otra vez por las horas que ha de durar el día y no más; porque siempre a una hora de salido o de puesto el sol ha de comenzar tocando la una. Este es todo el artificio de este reloj: la mano del pobre hombre que lo dirige del modo que se ha dicho. ¿Qué hay de aquí de extraordinario ni de misterioso? ¿Lo es, por ventura, la construcción de los relojes de Italia, que ellos por sí solos tocan hasta veinte y cuatro horas cada día? ¿Pues a qué tanto hincapié en el reloj, embaucando a los tontos?

Lo que hay notable para un observador es la costumbre de contar separadas las horas del día y de la noche, de la cual nació la construcción de aquella rueda que decía en este reloj. Esto sí que merece particular reflexión: que a pesar de ser los nuevos pobladores de esta isla naturales de Cataluña, Aragón, Rosellón, etc., adoptasen aquí una costumbre desconocida en aquellos países de contar las horas en la manera referida, y la adoptasen en lo civil y en lo eclesiástico. De lo primero no es menester más prueba que el citado reloj, que es propio de la ciudad y lo era ya en el siglo XIV, como queda dicho. De lo segundo hay muchas pruebas, pero basta por todas la Consueta de la sacristía desta catedral, escrita en 1511, en la cual se notan diariamente las horas de coro diurno y nocturno para régimen de campaneros, etc. Allí verá el que quiera como las horas de la noche se cuentan desde el ocaso del sol, y las del día de su salida, diciéndose a cada paso: a una hora de día, a IX hores de la nit, etc. Sólo se nota alguna vez que cuando habla de las últimas horas de la noche o del día usa de la frase siguiente: a tres hores a pasar de matinade, a una hora a pasar de dia, que quiere decir: tres horas antes que pase la madrugada, y una antes que pase el día.

Otra hora de la noche era conocida por el toque de una campana llamada dels lladres: que creo se tocaría a prima noche. Así en 1374 hacen mención las Actas capitulares de una causa criminal formada contra ciertos sujetos que habían herido a otros ante pulsationem cimbali latronum. En otros viajes se ha dicho más de esto. 

Ya que hablamos de campanas te incluyo la inscripción de una muy antigua de Santo Domingo de Palma. Dice así: Ave Maria, gratia plena, Dominus tecum. Ano Domini M.CCC.VIII. Jhesu bone, praece Dominici tibi praesta nos gratos efici. Amen + (a: Véase la estampa.).

Ave Maria, gratia plena, Dominus tecum. Ano Domini M.CCC.VIII. Jhesu bone, praece Dominici tibi praesta nos gratos efici. Amén


En esta iglesia como en todas las demás se siguió exactamente la cuenta de los años de la Encarnación hasta la ley general de Don Pedro IV de Aragón, que en 1351 introdujo la cuenta de los años a Nativitate, comenzándolos a contar rigurosamente desde el día del nacimiento del Señor. Mas es de notar que esta nueva ley sólo se observó en las escrituras y otros actos judiciales exteriores; y en lo que hacía al régimen interior la iglesia conservó constantemente el cómputo antiguo de la Encarnación. Así parece en los libros de fábrica y otros, y en la provisión y duración de oficios, que comenzaban en el día de la Encarnación. También consta de la Consueta de tempore, escrita después de dicha ley, en que se manda notar el año de la Encarnación en la tablilla que cada año se ponía en el cirio pascual. Con todo eso las Actas capitulares contaron a nativitate, sin duda por ser ya cosas que en algún sentido podían llamarse forenses. Y en esta costumbre permaneció el Capítulo hasta el año 1640, como verá cualquiera en sus libros, mudando siempre el año en el día de Navidad. Pero es de notar que en entrambas costumbres, así de contar los años desde la Navidad, como desde la Encarnación, siempre se decía el día 1.° de enero día primero del año, y en lemosín ninou o dia de ninou.

Otra cosa. En la sacristía de la catedral se conservan dos cetros de plata, o bordones de los que usan los sochantres y capas en el coro: son de harta antigüedad, que me parece alcanzará al siglo XIV: rematan en pirámide, y en sus lados y cuello se hallan las letras hebreas siguientes, que quiero copiar aquí: 

(N. E: Las letras hebreas no las puedo escribir, están en la página 250 del pdf que edito)

1.° 

En una parte

En la segunda

En el cuello

2.°

En la primera

En la segunda

En la tercera

En el cuello.


Acaso debió ser dádiva de algún Judío convertido, de los muchos que había en la famosa aljama que tenían en esta isla.

Y ya que he mentado a los Judíos, me ocurre añadir algunos privilegios que los Reyes concedieron a los de esta isla; y digo algunos de los que se hallan en la colección que posee Don Antonio Ignacio Pueyo, y que yo no pude acabar de copiar. Mas al fin siempre servirán de algo los seis que van copiados (a: Ap. núm. XIII.). Entre ellos está la escritura de población, que otorgó en 1247 Don Jaime I a favor del Judío Salomón y su familia, que vinieron de Cigilmensa: Sujulmesa o Subiulmeta, en el reino de Fez, donde poco antes vivía aquel Rabí Isaac, autor de la carta que sabes sobre la verdad de la venida del Mesías. En otro de 1252, establece que el Judío que se hiciese Cristiano fuera de las festividades de Pascua, Pentecostés y Navidad, pagase doce morabatines al fisco real. Los demás son sobre los préstamos, forma judicial, lugar y barrio de su vivienda en esta ciudad, etc., etc.

En el rebusco de papeles he topado con la copia que hice desde un principio de la correspondencia latina literaria que tuvieron a fines del siglo XV un Mallorquín llamado Arnaldo Descos, y Fr. Bernardo Boil, ermitaño de Monserrate. De este célebre anacoreta, conocido por sus obras, por el aprecio que de él hicieron los Reyes Católicos y por la figura que hizo en varios negocios políticos de su tiempo, se ignoran todavía muchas cosas, que acaso se ilustran con esta correspondencia, la cual existe en un códice, donde, con otras muchas cosas, la copió el citado Arnaldo, y que se guarda en el archivo de esta catedral. De todo ello es la copia adjunta (a: Ap. núm. XIV).

Pero advierto que del dueño del libro van copiadas pocas cartas, porque sobre ser su lenguaje poco culto y muy afectado, no contiene especie alguna que sirva a la historia pública. Y así he formado de ellas un extracto, que pueda servir de pie a las contestaciones de Boil, las cuales, si en todo no son ciceronianas, a lo menos tienen bastante gusto y agudeza de sentencias, y una fluidez no muy común en aquellos tiempos. Además, son las que descubren algunas noticias de su vida y ocupaciones, singularmente de su viaje a las Indias Occidentales, recién descubiertas, a quienes se dice que fue enviado como primer Vicario Apostólico. También consta por estos documentos que tuvo un sobrino que se hizo monje; y yo creo que este es el Guillermo Boil, Obispo de Gerona desde 1512. Otras curiosidades resultan de ellas, de que yo ya me he aprovechado, y se aprovecharán los que las lean con alguna manía histórica. Lo sensible es que no tienen fechas de años, y así no sabemos a cuál de ellos pertenecen. Mas hablándose de los descubrimientos de América, como de cosa muy reciente, precisamente deben suponerse escritas antes del 1500. Baste de esto y de miscelánea. A Dios. Mallorca, etc.

viernes, 21 de abril de 2023

CARTA CLIII. Noticia de algunas bibliotecas de Palma de Mallorca y de sus libros y códices más raros y no conocidos.

CARTA CLIII. 

Noticia de algunas bibliotecas de Palma de Mallorca y de sus libros y códices más raros y no conocidos. 

Mi querido hermano: Los ratos y días en que no estaban accesibles los archivos he empleado, según mi costumbre, en el escrutinio de algunas bibliotecas de esta ciudad, notando y apuntando algunas cosillas bibliográficas, dignas de la noticia pública, y no conocidas de nuestros bibliógrafos. Esta colección hubiera sido mucho más completa, si mi salud me permitiera ver todas estas librerías. Pero no ha sido posible examinar más que las tres o cuatro que diré.

Y no me he propuesto hablar de los escritores naturales de la isla. Esta empresa es para otros más desocupados que puedan fijarse exclusivamente en la averiguación de todos los pormenores necesarios para escribir una Biblioteca de provincia. Cosa que aquí está por hacer todavía y que es de esperar no tarde en verificarse, según la buena disposición y amor al bien público que veo en mi amigo el presbítero Don Josef Barberi, el cual de los sujetos que he tratado aquí, es casi el único capaz de esta empresa, para lo cual no basta talento y erudición si no hay genio particular para esta clase de trabajo. En resolución, esto no me toca a mí. Y ya que tomé las notas que digo, allá van y valgan lo que valieren: siempre será añadir algo al acervum mercurii.

En primer lugar en la biblioteca pública episcopal establecida y dotada por el Obispo Don Juan Díaz de la Guerra, vi un cod. ms. fol., cuyas hojas, parte son de pergamino y parte de papel, escrito a dos columnas. Contiene la Summa fratris Monetae, ordinis fratrum Praedicatorum contra hereticos. Es sin duda alguna de fines del siglo XIII, y más antiguo que los pocos códices que disfrutó para la impresión que hizo de esta obra en el siglo pasado el Italiano P. M. Fr. Tomás Agustín Ricchini, de mi orden. Entre algunas variantes que hubieran ilustrado más el escrito hallo que en el lib. 3, cap. 3, donde dicho padre leyó que Moneta escribía su obra en el año 1244, nuestro códice dice: non enim sunt plus quam mille ducenti XL et unus annus, quod ipse (Christus) factus est homo.

Otro códice fol. ms. en papel en el siglo XV, contiene las obras siguientes: Incipit pastoralis liber magistri Francisci Eximeneç; es la obra ya conocida de este doctísimo Franciscano, dedicada a Don Hugo, Obispo de Valencia, y escrita a instancias de Miguel de Miracle, rector de la iglesia de Penaguila, como se ve en su dedicatoria. =

Tractatus de principatu Papae editus a Fr. Augustino de Roma, ordin. heremitarum S. August. = Propositio adversus quosdam curiosos detractores ecclesiae, quia possidet, et super statu eius: facta coram sanctissimo et beatissimo Romano Pontifice Dno. Nicolao quinto, viro devotissimo. Esta obra es de Lope de Espejo, natural de Orihuela, de la cual Don Nicolás Antonio dio una noticia completa y muy conforme con este códice, que se escribió en Italia.

Otro códice, igual al pasado, comienza por el Salustio, que está entero, con todas sus invectivas, y las oraciones de Cicerón tocantes a aquellas guerras. Contiene varias obrillas de ingenio de autores Italianos; y también el Bartolomei Facii ad Karolum Vintimilium de origine inter Gallos ac Britannos belli: cosa del siglo XV. Entre estos escritos se halla uno que más nos interesa, y es: Oratio coram Sanctissimo D. N. Papa facta per reverendissimum in Xpo. patrem dominum Jo.

Maioricen. Episcopum, et Serenissimi Domini Regis confessorem. Es la que ya dije del Obispo Don Fr. Juan García, y que envié con el episcopologio. Estos son los únicos manuscritos que aquí he hallado dignos de atención. También la merecen algunas ediciones raras del siglo XV. Tal es una ignorada de Don Nicolás Antonio (y no sé si del P. Méndez, cuya obra no tengo a mano) de uno de los escritos más famosos de Raimundo Lull. Es un vol. fol. a 2 col. Incipit liber divinalis vocatus Arbor scientiae editus a reverendissimo doctore magistro Raymundo Lull. = Pr.: Deus cum tua virtute incipit arbor scientiae. In desolatione et fletibus stans Raymundus. = Al fin se lee: Deo dante arbor scientiae reverendissimi magistri Raimundi Lull presens opus nuncupatum in nobili civitate Barchinone per Petrum Posa, presbiterum et Cathalanum XXII. augusti anni M.CCCC.LXXXII. correctissime fideliterque completum fuit. Deo gratias. Amen.

Otro impreso hallé aquí, y es el primero de esta isla, del cual daré razón, por si no lo conoció el P. Méndez. Es un tomito en 4.°, de unas treinta hojas, sin foliatura. Empieza así: Incipit tractatus magistri Johannis de Gersonno, Cancellarii Parisiensis de regulis mandatorum. - Prol. Agamus nunc interim quod natura, etc. - Al fin se halla este epígrafe:

Doctissimi magistri Johannis de Gersonno presens opus: opera et impensis reverendi Bartholome Caldenteii, sacre theologie proffessoris impressum est: arte vero et industria ingeniosi Nicolai Calafaii (f. Calafati) Balearici in maiori ex Balearibus imprimentis, anno salutis MCCCCLXXXV, die vero XX mensis junii.

- Sigue: Jacobi Olesie civis balearici vice impressoris ad lectorem epygramma.

Perstrinxit legis praxim moresque Joannes,

Cui de Gersonno nomen habere datur.

Si ergo tuum, lector, pectus celestia tangunt,

Hunc eme: plus solus quam tibi mille dabit.

Iste docet mores sacros, animumque perornat,

Vitaque sit nobis qua peragenda via: 

Quid sit honestum, quid iustum, quid denique sanctum,

Quidve pium monstrat, quae fugienda mala.

Detegit hic celum, et callem flagrantis averni

Neu phlegethonteis afficerere malis.

Ad summam: hic vigili ducit rectore carinam,

Quae mundi immergi naufraga posset aquis.

Huic igitur grates tanto pro munere, lector,

Redde; sed est nobis gratia habenda magis. 

Ille opus exegit: fateor; sed copia habendi 

Nostra est per terras multiplicata manu.

No debo olvidar la noticia de algunas ediciones extranjeras, por ser de aquellas clásicas que con tanto conato examinan y celebran los bibliógrafos de otras naciones. Y sea la primera el Comentario del jurisconsulto Juan Andrés sobre las constituciones llamadas Clementinas, impreso en Roma en 1473, en folio, del cual hay aquí un ejemplar, con este epígrafe final copiado a la letra: "Presens harum Clementinarum preclarum opus Jo. An. iuris canonici lumen. alma in urbe Roma. totius mundi regina et dignissima Imperatrix. que sicut pre ceteris urbibus dignitate preest. ita ingeniosis viris est referta. non attramento plumali calamo neque stilo ereo. sed artificiosa quadam adinventione imprimendi seu caracterizandi sic effigiatum. ad Dei laudem industrieque est consumatum. Per Udalricum Gallum Almanum. et Simonem Nicolai de Luca. Anno Domini M.CCCC.LXXIII. die vero sexta mensis Julii.” Quiso de buena fe el impresor advertir que el libro no estaba escrito con pluma, no tanto por su semejanza con los manuscritos, que es muy grande, cuanto por precaver el daño que sufrieron en París los compradores de las Biblias que imprimió Fausto N., el cual vendió los ejemplares impresos a precio tan subido, como si fueran escritos de mano. Y yo sospecho que este ejemplar está impreso de plancha, y no con caracteres sueltos; y que a eso alude la palabra effigiatum. En fin, de esto podrá decirse más, si conviene, viendo los bibliógrafos modernos.

Lo mismo podrá hacerse con la antigua y primera edición de Apuleyo, de que hay aquí un ejemplar muy bien conservado, en un vol. fol. sin signaturas ni foliatura, donde están todas sus obras, con el Breviario que trabajó Alcinoo de la vida y doctrina de Platón. Allá va su epígrafe final: Lucii Apuleii platonici madaurensis philosophi metamorphoseos liber: ac nonnulla alia opuscula eiusdem: necnon epitoma Alcinoi in disciplinam Platonis desinunt. Anno salutis M.CCCC.LXIX. Paulo Veneto regnante secundo. anno eius quinto. die vero ultima mensis Februarii. Rome in domo Petri de Maximo. No honra menos a esta biblioteca la posesión de otra edición extranjera, pero que puede reputarse por española por serlo el sabio monje de Poblet Blas Romero que la procuró, a quien debe Italia la correctísima impresión de las obras morales de nuestro Séneca, que es la de que hablo. Es la misma de que en mi viaje de Francia encontré dos ejemplares en Perpiñán. No me será desagradable dar aquí su noticia. Es un vol. fol. que contiene todas las obras morales de aquel filósofo, y al fin de sus Proverbios se halla este epígrafe: Sub domino Blasio Romero, monacho Populeti, philosopho ac theologo celebri est impressum hoc opus in civitate Neapolis anno Domini M.LXXIIIII (sic), Divo Ferdinando regnante. En la nota numeral falta la de los centenares que debe ser CCCC. Y aunque al fin no se halla nota de edición, mas es la misma desde el principio al fin del volumen, y no queda duda en que toda es de ese año 1475.

Todos estos libros eran antes de la santa iglesia catedral, de cuyo archivo los sacó el M. I. Cabildo y regaló a esta biblioteca el año 1798 para la común utilidad. Y los ha encuadernado curiosamente y a sus costas el bibliotecario Don Guillermo Remón, presbítero.

En la biblioteca de este convento de mi orden he visto algunas ediciones antiguas, dignas de memoria. Una hay de la Ética y otros libros de Aristóteles, fol., cuya época no pude saber por carecer el libro de las primeras y últimas hojas. Pero ciertamente es de las primeras producciones de la tipografía, como se ve no sólo en que carecen de foliaturas, sino en el aire que se da a los manuscritos, y por un no sé qué que se echa ya de menos a proporción que este arte se fue extendiendo.

De la obra De regimine Principum de fray Egidio Romano, del orden de San Agustín, se halla aquí la versión lemosina en dos diferentes ediciones de Barcelona. La primera concluye así: "Referida gracia al omnipotent Deu es dat fi a la preclarissima e divina obra de moral philosophiae a recolligida de tot lo discors de ethica, iconomica e politica del princep dels philosophs Aristotil per lo litteratissim e (leo litteratissime) reverend mestre en sacra theologia frare Egidi Roma del orde de Sant Agosti, en vulgar catalá, ab algunes gloses molt specials posades en la fi dels capitols, prenent lo vocable textual sobre lo qual es la glosa. Impressa en la insigna ciutat de Barcelona per mestre Nicolau Spindeler empremptador, a despeses del venerable en Johan Çacoma, venedor de libres; emendat e corregit per lo reverend mestre Aleix, regint les scoles en dita ciutat: lo segon dia de noembre, any M.CCCC.LXXX.” Es un vol. fol. sin foliaturas, impreso magníficamente a plana entera. La otra edición tiene el mismo epígrafe final, sino que se dice impresa per Johan Luschner, alemany, empremptador, a despeses del honorabile Franch Torber, mercader alemany... a XXII de octubre, any M.CCCC.XCVIII. Vol. fol. a dos col. sin foliatura. Va lo dicho por si es especie nueva y no conocida, que aquí no me es fácil reveer mis trabajos anteriores ni lo que publicaron algunos bibliógrafos. En la misma duda estoy acerca del autor de esta traducción lemosina, de quien el libro no da indicio alguno.

También se halla el opúsculo del Papa Inocencio III antes de subir a la Silla de San Pedro, De vilitate conditionis humanae, impreso en Barcelona por el presbítero Pedro Posa, año 1499, de cuya obrita ya he hablado otras veces.

Más apreciable es otra edición no conocida de nuestros bibliógrafos, porque tampoco lo es la obrita que contiene. Su autor, el noble Valenciano D. Francisco Carroz, está reconocido por Bayer en la Bibl. vetus de Nicolás Antonio, como poeta de fines del siglo XV. Mas aquí entre los tomos de Varia en 4.° hay un escrito suyo en prosa lemosina, que es y debe llamarse poema moral. Comienza por este título, estampado en la primera hoja con letras grandes: Moral consideracio contra las persuassions, vicis y forces de amor. Sigue en la segunda hoja una carta con este epígrafe: Fon demanada diverses voltes per una persona de gran stima a Don Francesch Carroç Pardo de la Costa una sua moral consideracio; lo qual trames aquella ensemps ab la present lletra. Sigue una carta dirigida al que le pedía su obra, la cual dice que tenía compuesta diez o doce años había. A la carta sigue otra vez el título así: Regoneixença e moral consideracio contra les persuasions, vicis e forces de amor, feta per lo noble Don Francesch Carroç Pardo de la Costa. La obrita con lo dicho compone veinte y ocho hojas de bellísima letra; mas no consta el lugar ni año de impresión, que también carece de foliatura; pero siendo tan parecida a las de aquella ciudad, de donde era natural y donde vivía el autor, es claro que debe tenerse por de la misma, y según conjeturo del año 1480 al 1490. Para muestra de su composición y lenguaje limado copiaré aquí el trozo siguiente. Después que al estilo de los poetas de aquel tiempo personifica a la razón que rebate los argumentos de la pasión y persuade la vanidad y locura de los que sirven al amor (en que hay cosas graciosísimas), el autor, que supone haber oído estos razonamientos en el silencio de la noche y en el secreto de su corazón, concluye así su tratado: "De tan gran excellencia foren vistes a mi les coses hoydes e contemplades, que mes avant los dubtes de ignorancia, la diversitat dels contrasts, e los combats d' importuna temptacio, no trobaren loch en mi. Axi que per gran benaventura mia, vent (veent, veient) la causa de amor condemnada, e la mia flaca força defesa; ¿com pore yo callar e detenirme que les mies altes veus no criden:? ¡O mortals, o mortals! y mes vosaltres enamorats! obriu, obriu los ulls: que aquell, a qui naixer li have, morir li resta: y al que segueix error dolor li es aparellada. No durmau, que temps es de vellar. Vellau, vellau; e si la pesada son dafectio enganosa vos te occupats, tant que clar iuhy nous consenta, desperteus la vostra propria naturaleza, de la qual grans clamors hoig esent que son los que dona. Mirau que diu: liberts, carts, simples, tractables, sens enveja, sens vana gloria, sens superbia, sens crueldat, sens frau, sens cobdicia vos engenrri. De mi no enganos pensament, no cautela simulada, no la fe corrompuda, no falsa religio, ni les tantes diversitats de mals rebés. Hon es lo reçel, hon la vergonya, en veure que pijors finam, que no començam? Esi (E si) aquesta (veu) no basta, que tant y mes de quant bastar deuria, despertenvos los incomportables dans, que de vostres breus y dolorosos delits sentiu. Despertenvos les forces de la raho, e lo premi de la virtut: la una volent, e laltra seguint, sereu guiats, sereu defensats, seran spargits los nuvols que porten ceguedat a la vista, etc.” Tampoco quiero omitir que hablando de los males y precipicios a que el amor ha conducido a los que le siguen, entre los varios ejemplares de los antiguos que cita a este propósito, pone los dos siguientes: Lo nostre Massias, l'  espanyol Oliver de si mateix amant foren homeyers. ¿Quién serán estos Masias y Oliver, homicidas de sí mismos por la fuerza y violencia de su amor? Sin duda serían desgracias recientes y conocidas de todos en tiempo del autor. Item: he advertido que a lo que ahora llamamos minutos de hora, él todavía llama puntos, cuando pintando la vanidad que suele reinar en los profesores de las artes y ciencias dice: "Pasem al astrolech: sent com les steles e los signes, los planets tarts o langers en hores e punts ab lo seu moviment les spheres discorren.” Debes saber que hasta fines del siglo XV no se conoció el nombre de minutos. Y baste de su libro: el cual, si me queda ocio para ello, he de copiar entero. Vamos a otra cosa.

Hállase aquí la edición que creo ha de ser rara de la obra siguiente de medicina: Johannis Maliani, Mediolanensis quaestio de caliditate corporum humanorum tempore hiemis et estatis, et de antiparistasi, ad celebrem philosophorum et medicorum universitatem Ticinensem. = Al fin del tratado dice el autor: Finita Galiate X octavo mensis novembris M.CCCC.LXXII. Luego sigue este dístico tipográfico:

Mira Parmensis Zaroth me Antonius arte

Anguigeri prima fecit in urbe ducis. 

M.CCCC.LXXIIII. die XX. septimo augusti.

Es un vol. en fol. de sesenta y dos hojas, impreso a dos columnas sin foliatura ni signatura alguna, muy bien conservado.

De la obra lemosina de albeiteria de Manuel Díez se halla aquí una edición no conocida, y sin duda anterior a las que lo son. Dice así el epígrafe final: "Fonch estampat lo present tractat molt necessari e profitos per qualsevol cavaller ho gentil home, ço es, per saber coneixer qualsevol malaltia ho accident que pot venir al cavall ho a la mula e saber curar aquelles. E fonch estampat en la insigne ciutat de Barçelona al Bany nou per Dimas Bellestar y per Joan Gigló. E fonch acabat a XVIII del mes de juyn del any M.D.XXIII.”

Del Español Salvador Matamoros habló Nicolás Antonio, mas no tuvo noticia de la siguiente obra suya: "Reveren. D. Bacalaurei Salvatoris Romani Matamoros Hispani. = Computus novus ecclesiasticus sive Romanus, in quo multa ad diversarum rerum notionem continentur, aureus scilicet numerus, concurrens sive epacta, littera dominicalis, dierum festorum mobilium inventio, lunae coniunctiones, etc. = Quae omnia unusquisque perpetuo absque breviario, calendariove, summa brevitate facillime per sinistrae manus iuncturas consequi poterit; noveritque quantam ipse reveren. baccalaureus Salvator ecclesiasticis nedum, sed et laicis omnibus utilitatem miro attulerit artificio. = Venetiis apud Jacobum Picaiam excudebat 1570.” Todo es del frontis del librito en 4.° dedicado al Cardenal Cervantes, Arzobispo de Tarragona. El autor dice que concluyó esta obrita idibus aprilis 1567 in Romana curia.

Estas y otras antiguallas bibliográficas hay en esta librería, que ciertamente no merecen el desprecio y olvido en que yacen, que respeto de algunas de ellas llega a algo más que a desaliño y poca curiosidad.

La biblioteca de los PP. Capuchinos llamó particularmente mi atención, y llamará la de cualquiera que tenga gusto de ver una pieza aseada, y unos libros colocados y cuidados como se merecen tan fieles amigos. Esto debe la que digo a su bibliotecario el P. Fr. Luis de Villafranca, que no sólo la ha enriquecido con su diligencia, sino que ha encuadernado por su mano los libros, restituyendo a muchos la vida, que estaban a punto de perder en manos de especieros, y de otros que no lo son. Valiole para esto un conocimiento no vulgar en la bibliografía, amén de los que posee en la historia de su patria. Pero lo que más le agradecí fue la colección de ediciones del siglo XV, que tiene reunidas con algunas obras manuscritas, de los cuales me he propuesto indicar las más notables para ilustración de los extranjeros, que en esto, como en otras cosas, debían habernos tratado con menos orgullo.

Posee, pues, esta biblioteca la primera impresión de los XXXVII libros de Historia natural de Plinio, impresos en Venecia por Juan Spira en 1469; en un vol. fol. max., y tan bien conservado, que yo dudo puedan estarlo más los que posean otras naciones.

Una Biblia fol., a dos col., sin principio ni fin; mas su carácter, abreviaturas, tinta y otras notas, la hacen atribuir al 1470, o por ahí.

El opúsculo que el Papa Sixto IV escribió, siendo Cardenal, sobre la famosa cuestión De relicto in terris Sanguine Christi; al cual sigue el otro tratado suyo, también conocido, De potentia Dei. Todo compone un vol. fol. entero y bien conservado, sin año ni nombre de impresor. Mas debe advertirse que al libro precede una epístola dedicatoria al mismo autor, siendo ya Papa; y en ella, al fin, se lee lo siguiente: Johannem Philippum de Lignami Messanen. Siculum insuper, B. pater, ita commendatum in omnibus habeas, ut S. tuae servum, ut egenum, ut fidelissimum, immortalitatisque et laudum tuarum studiosissimum. Cabalmente este Felipe de Ligname era un impresor de Roma, de quien quedan algunas ediciones de los años 1470, 73 y 75. ¿Y no bastará la circunstancia de expresarse su nombre en aquella carta para decir que él la imprimió con toda la obra? Porque si fuera otro el artífice, no es regular que él, con sus mismas manos, eternizara el nombre de otro artífice; y en caso de recomendación al Papa, buscaría la suya primero que la ajena. Todavía queda que observar en este libro; y es que al fin, después del registro de los cuadernos, hay en medio de la plana estas palabras, y de esta manera:

GOD

.AL

Las cuales no sé explicar. Y si alguno quiere que expresen el nombre y apellido del impresor, y si es así en la realidad, entonces vendrá abajo la conjetura que dejo apuntada. Sea enhorabuena; venga abajo; entretanto no me pesa de haberla indicado. Tal vez sea Deo gratias en alemán (Gott sei Dank).

Un vol. en 4.° contiene las obras del Petrarca. Al fin de sus canciones y sonetos se halla esta nota: Qui finisce le canzone et sonecti del Petrarcha, poeta excellentissimo, facte in Roma nel tempo del Sanctissimo in Xpo. Patre et Signor nro. S. Paulo per la divina providentia Papa II. et del suo pontificato anno septimo. Nelli anni del nro. Signor jho. xpo. M.CCCC.LXXI. a di X. di luglio. A este epígrafe siguen todavía otras canciones del mismo, y un compendio de su vida. Conocen los extranjeros las ediciones de estas poesías del año 70 y 73; mas esta del año 71 no la conocen.

Lo mismo sucede con la impresión de la suma Defecerunt de San Antonino de Florencia de 1476, hecha en Venecia por Juan de Colonia y Juan Manthen de Gherretzhem. Del mismo Santo está la edición ya conocida de la Suma, impresa en 1477. Lo mismo con la del libro IV de los Sentenciarios de mi Angélico Doctor Santo Tomás de 1478, cuyo epígrafe final dice así: Preclarum hoc opus Quarti scripti Sancti Thome de Aquino artificiosa quadam adinventione imprimendi seu caracterizandi, absque ulla calami exaratione sic effigiatum, et ad Eusebiam Dei industrie est consummatum Venetiis per magistrum Leonardum Vvild (Wild) de Ratispona anno Domini millesimo quadringentesimo septuagesimo octavo. die decima octava mensis marcii. Lo mismo con esta otra: Fenestellae de magistratibus romanorum opus clarissimum ac perutilissimum. Impressum Mediolani in kalendis mensis Februarii. M.CCCC.LXXVII., en 4.°, sin foliatura. = Dejo aparte otras muchas de escritores de mi orden, que estas las he notado en su Biblioteca particular, donde lo lucirán bien.

No tengo ocio para examinar si las que voy a decir son o no conocidas; mas ellas son antiguas, y merecen serlo. = Un vol. fol.: Expletum est opus istud moralium beati Gregorii pape diligentissime correctum et emendatum per D. Bartholomeum Cremonen. canonicum regularem. Impressum Venetiis per Reynaldum de Novimagio Teoteutonicum anno Domini millesimo quadringentesimo octuagesimo, quartodecimo Junii, presidente Venetiis inclito duce Joanne Mozenigo. = Otro idem: Excellentissimi historici Platinae in vitas summorum pontificum ad Sixtum IIII. pontificem maximum preclarum opus feliciter explicit. accurate castigatum ac impensa magistri Joannis Vercellensis. M.CCCC.LXXXV. die X. Februarii. = Otro en 4.°: Expliciunt Sermones Giliberti super cantica canticorum Salomonis per Nicolaum Florentie, anno Domini. M.CCCC.LXXXV. sexto decimo chalendas maias. = Otro idem: La Suma de ecclesiastica potestate del Agustiniano Fr. Agustín de Ancona, en Venecia, 1487, por Juan Leoviler de Hallis. = Otro en fol.: Opera et libri Thomae de Kempis hac charta quam salutari fine clauduntur in vigilia Andreae Apostoli anno Xpi. 1494. Nuremberge per Caspar Hochfeder Opificem accuratissime impressi. = A este tenor hay otras muchas ediciones extranjeras de escritores de otras naciones, cuyo catálogo sería larguísimo; y que no omito por eso, sino porque quiero decir lo que hay de cosas nuestras. Pero antes me ocurre no dejar en el olvido una impresión, que es sin duda alguna de las primeras, aunque no se notó ni el año ni el lugar, con ser así que el volumen, que es en 4.°, está completo; el cual tiene la singularidad de notar los folios en cifras romanas al pie de las planas: y son en todo ciento ocho. Contiene los siguientes tratados: Epistola beati Eusebii ad Damasum Portuensem episcopum, ad Theodosium Senatorem romanum, de morte gloriosi Jheronimi doctoris eximii: = Epistola beati Cirilli secundi Jherosolimitani episcopi ad Augustinum Aurelium doctorem Iponen. episcopum de miraculis beati Jheronimi doctoris eximii. Vamos ahora a nuestras cosas.

Del célebre Antonio de Nebrija dice Don Nicolás Antonio que el año 1508 todavía no había publicado su famoso Diccionario. ¿Cómo podré yo creer tal cosa, cuando le hallo aquí ya impreso en 1507, y lo que es más, traducido al idioma catalán? Pues ello es así. Tienen estos PP. un vol. fol., que comienza por la dedicatoria de Nebrija a Don Juan de Zúñiga, traducida del latín al catalán, e impresa a dos columnas. Sigue el Diccionario del latín a la correspondencia catalana; y al fin de él este epígrafe tipográfico: "Aelii Anthonii Nebrissensis grammatici lexicon ex sermone latino in hispaniensem Barchinone impressum per Karolum Amorosis impençis fratris Guabrielis Busa, ordinis divi Augustini anno M.D.VII.” = Después de esto, en la misma plana final, dice de letras muy gruesas: Vocabularius Aelii Anthonii Nebrissensis. Y en la plana siguiente empieza la dedicatoria al mismo Zúñiga del Diccionario castellano al latín, traducido también al idioma catalán lo que aquel sabio escribió en castellano: y luego el Diccionario catalano-latín. Al fin del cual hay esta nota: "Aelii Anthonii Nebrissensis grammatici dictionum hispanarum in latinum sermonem translatio explicita est. Ac denuo ex hispano in acetanicum idioma accuratissime nitidissimeque transcripta: impressaque Barcinoni per Carolum Amorosis, impensis fratris Gabrielis Busa. anno millesimo quingentesimo septimo, nono calendas octobris.” Antes de pasar adelante, reflexiona dos cosas: 1.a, que en estos epígrafes claramente se dice que la versión catalana se hizo de la edición castellana: 2.a, la rareza de llamar acetanicum al idioma catalán, en lo cual sin duda quisieron decir Lacetanicum, aludiendo a los pueblos Lacetanos, que en tiempo de los Romanos eran el territorio de Barcelona y sus inmediaciones. Todavía me falta decir algo de este libro, y es un epigrama que el impresor Carlos Amorós puso al fin, de esta manera: Idem Carolus ad lectores de impressione tetrastichon.

Si quando nostris placuit candore metallis

Hanc eme, que tota candida parte nitet: 

Hanc eme; nec pavidus faciat deponere pallor

Nummorum, quando venditur aureolo.

No es menos apreciable la edición del Tito Livio, traducido al castellano, del año 1516, que ni Nicolás Antonio, ni Pellicer (Biblioteca de traductores), ni otro alguno que yo sepa, conocieron. Y el caso es que yo tampoco conozco al traductor. Pero aquí está su obra en un vol. fol. de ciento ochenta hojas, a dos columnas, que contiene las tres Décadas primeras de dicho historiador. La nota de la impresión dice así: Aquí se acaban las decadas de tito livio nuevamente emprimidas en la imperial ciudad de Toledo por Juan de Villaquiran imprensor (sic) de libros. Acabose a veynte dos dias del mes de Março año del nascimiento de nuestro redemptor et salvador Jesuchristo de mill et quinientos et deziseis años.

Al fin del mismo vol., en que está la edición de Fenestella que cité arriba, se hallan los dos breves escritos de nuestro Diego de Muros: Breve epithoma rerum apud Malacam gestarum anno M.CCCC.LXXXVII. editum

per D. Murum Reverendissimi D. Cardinalis Hispaniae secretarium: ad reverendissimum patrem et amplissimum dominum D. Jo. Episcopum  Albanensem Cardinalem Andegavensem ex castris missum. Son cuatro hojas en 4.° = Ad Reverendissimum D. Cardinalem Andegavensem Didaci Muros R. D. Cardinalis Hispaniae secretarii de victoria Serenissimi Regis Hispaniarum contra mauros granatenses anno LXXXVIII. feliciter parta Epistola incipitur. Esta carta está fecha en Murcia a 4 de las calendas de agosto, año 1488. Estas dos obrillas, aunque impresas, son de las que deben reputarse por manuscritas, porque su misma pequeñez las ha hecho raras; y así irán copiadas para nuestras Colecciones. De ellas hizo mención Don Nicolás Antonio. Mas, ¿de dónde sacaría este bibliógrafo que Diego de Muros era religioso Mercenario y Obispo de Tuy en el año 1473? Porque estos escritos de los años 1487 y siguiente suponen que no hubo tal cosa, si bien lo miramos.

A continuación de estos impresos se halla otro,

intitulado: "Oratio Antonii Geraldini prothonotarii apostolici, poetaeque laureati, ac regii oratoris, in obsequio canonice exhibito per illustrem Comitem Tendille per prothonotarium Methimnensem, et per ipsum prothonotarium Geraldinum nomine Serenissimorum Ferdinandi regis et Helisabet regine Hispanie Innocentio octavo eius nominis pontifici maximo.” También irá copiada, para el objeto que dije, esta oración, al fin de la cual se dice: habita Rome XIII. kal. Octobris anno salutis sexto et octogesimo supra CCCC. et M. Y digo que la copiaré, no sólo por pertenecer a cosas de España, como es la embajada de nuestros Reyes al Papa, sino también porque yo tengo a su autor Geraldino por Español. Muéveme a ello: primeramente el verle encargado de dicha embajada, junto con otros dos Españoles, y por unos Reyes que ninguna necesidad tenían de dar este honor a un extraño. Por otra parte, en mi Viaje a la iglesia de Gerona, en un códice manuscrito, donde el curioso Catalán Pedro Miguel Carbonell dejó escritas varias cartas y poesías de sus amigos, hallé algunas poesías latinas de este Antonio Geraldino, y de otro del mismo apellido, llamado Alejandro, apellidándose ambos Amerenses. Lo impuestos que ambos se muestran en nuestras cosas en aquellas composiciones, y la particular amistad con nuestros literatos de aquel tiempo, me han movido siempre a tenerlos por nacidos en Amer, villa de Cataluña, y por unos de aquellos Españoles, a quienes el benéfico reinado de Alfonso V de Aragón atrajo a Italia, donde con mucho honor nuestro cultivaron las ciencias.

Todavía queda otra cosilla en este volumen; y es: Valasci Ferdinandi, etc., illustrissimi Regis Portugalliae Oratoris ad Innocentium octavum pontif. max. de obedientia oratio: la cual tampoco es conocida, que yo sepa.

Vaya ahora la breve noticia de una obrita lemosina, sino que no conozco a su autor, ni aun consta el año de la impresión ni el lugar; pero es indubitablemente de fines del siglo XV. Es un tomito en 4.°, de ciento veinte hojas, en la primera de las cuales, que es la portada, se ve dibujado un penitente confesando sus culpas a un religioso, y al pie de la estampa se lee:

Dels confessors la vera guia

Dels confitens segura via.

En la hoja siguiente, al principio de la obra, se lee este título: Enterrogatori e confessional en quatre parts suptilment dividit. Es lo que indica: método para confesarse.

Hay también un Diario de los sucesos de la armada de la liga, mandada por el Serenissimo Señor Don Juan de Austria en los años 1571, 72, 73 y 74: escrito por Fr. Miguel Cerviá, religioso Franciscano, natural de Mallorca, Vicario general de la armada (según se dice) y confesor de dicho Don Juan, como él mismo lo dice, al fin del año 1572. Es un tomito corto, manuscrito, en 4.°, que dándolo Dios copiaré antes de marchar.

Del notario Catalán Francisco Solsona está el Stilus capibreviandi, o de ordenar los Cabreos (capbreus), de una edición muy anterior a la que indica Nicolás Antonio del año 1561, y esta es de 1547, en Barcelona, por Salvador Leget. Y ya que lo nombré, allá va su título entero: Stilus capibreviandi, cum multis questionibus, ac aliquibus regie audientiae decissionibus ad rem facientibus, cum formis creandi iudices, concessionum territoriarum, stabilimentorum, novarum laudationum, recognitionum, amortizationum, et aliquarum litterarum ordinario et alcaldis missarum. Al fin del tratado, dice de sí mismo el autor que nació en la villa de Anglesola, que lo es de Cataluña.

Manum de tabula, porque si hubiera de notar todas las impresiones que voy hallando omitidas por nuestros bibliógrafos, faltaría al principal objeto de mi viaje. Esa ocupación sería muy propia de la biblioteca real, por ejemplo, que ya debió aumentar y enmendar la Biblioteca nova de Nicolás Antonio, cuando la reimprimió en 1783, y no dárnosla tal cual la dejó su autor. Y no porque yo tenga esta carga por tan propia de aquel establecimiento, dejo de apuntar cuanto puede contribuir a aquel objeto, sino que no lo digo aquí, porque su lectura sería muy molesta. Además de todo esto hay en la misma librería los códices rituales propios de esta diócesi, de que ya hablé en lo de ritos, y otros Misales impresos a fines del siglo XV y principios del siguiente; de todo lo cual se sirve Dios, como sabes, para la historia general de nuestros ritos antiguos.

Un caballero particular de esta ciudad, llamado Don Antonio Ignacio de Pueyo, posee una biblioteca curiosa con algunos mss. que merecen memoria, y son:

Un códice fol. men. en vit. ms. en 1291, como se lee en el frontis, y contiene todos los privilegios y franquezas concedidas hasta aquella época a los habitadores de Mallorca, así por el Rey Don Jaime I de Aragón, como por su hijo Don Jaime, heredero de estas islas, antes y después de reconocerse feudatario de su hermano Don Pedro III de Aragón. Están copiadas enteras las mismas escrituras, pero traducidas al lemosín; y aunque esto desmerece en la diplomática es apreciable para ver el uso que se hacía del idioma lemosín y su riqueza. ¿Y qué había de hacer sino copiarlo todo para aumentar con este los cuerpos de legislación del siglo XIII y XIV que tengo recogidos? Allá va pues (a: Ap. núm. XII.). Sólo he omitido los Usatges de Barcelona que están al fin del libro, porque estos ya son conocidos en el continente. El códice debió servir para alguna curia o corte o dígase juzgado de esta isla; si no es que digamos que sirvió para uso de algún Judío o de su aljama de esta ciudad en atención a algunos letreros rabínicos que se hallan en algunas hojas. Al lado de este códice está colocada y muy bien otra colección de los privilegios concedidos a los Judíos de Mallorca en los siglos XIII y XIV; de la cual he podido copiar pocos documentos.

Otro códice, fol. max., de mayor mérito, aunque no de tanto provecho, es el que contiene las obras del poeta Stacio Papinio Surtulo, es a saber, los XII libros del Thebaidos, los V del Achileidos (a) y los IV de las Silvas. Es sensible que a todas estas obras falten algunas hojas al principio, porque el códice es de gran lujo y indubitablemente del siglo XII, como se ve en la letra minúscula del texto. Y aunque los Italianos del tiempo de Alfonso V de Aragón remedaron estas antiguallas, esta sin embargo la tengo por del siglo que he dicho. 

Hay también un fragmento (en dos hojas en fol. que habían servido de cubiertas a algún libro) del concilio IV Toledano, esto es, desde su cap. 42 hasta el 70, ms. del siglo XI, y en el que he notado algunas variantes.

Posee también dicho caballero algunos opúsculos raros ya entre los literatos. Item: la obra del Cardenal Besarion Adversus calumniatorem Platonis, de la edición romana del siglo XV, sin nota de año, por Conrado Suueynbeym y Arnoldo Panartz.

(a) Después de mi regreso al continente he visto algunas ediciones de este poema Achilleidos, en las cuales sólo se conocen sus dos libros primeros. Si los tres restantes son de Stacio y no se han publicado aún, ¿cuánto más sube el precio de este códice?

Item el Teophrasto De historia et causis plantarum, impreso en Tarvisio en 1483, con algunas otras curiosidades.

Y esto y no más digo de las bibliotecas de Mallorca.

A Dios. Palma, etc.