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domingo, 20 de agosto de 2023

I. Zaldi baten bicitza. Indalecio Bizcarrondo, Vilinch.

I.

Zaldi baten bicitza. 

Poesía por don Indalecio Bizcarrondo, 

Vilinch. 

(Dialecto guipuzcoano) 


Zaldi baten bicitza.


Entre las poesías festivas y satíricas del país vasco, no habrá quizás una que haya alcanzado mayor popularidad que esta del malogrado vate donostiarra Vilinch. Había allá por los años 1860 - si mi memoria no me es infiel, - un carro tirado por un jamelgo blanco, destinado a la limpieza de las calles de San Sebastián. El pobre penco, encargado de tan penosa tarea cotidiana, había enflaquecido hasta lo imposible, a fuerza de palo y de trabajo, y quizás también de la no sobra de alimento.

Aquella arpa viviente, aquella sombra de caballo, que recorría sin cesar las calles de la ciudad uncido a su carro, inspiró al pobre Vilinch esta composición, llena de gracia, conocida vulgarmente con el nombre de Zaldi zuriyarena.

Esta poesía, una de las pocas festivas de Vilinch, acreditó más y más el nombre de este desgraciado poeta, e inmortalizó a aquel infeliz caballo blanco, casi tan popular en nuestro país como lo es en Castilla el famoso Rocinante del celebérrimo Don Quijote de la Mancha

Zaldi baten bicitza, con todo y estar escrita sobre un asunto tan pobre y vulgar, sobrevivirá mientras se hable la lengua euskara como una de las mejores composiciones satíricas escritas en dicho idioma, por la espontaneidad que revela, por lo gráfico de la pintura, la viveza del colorido, y la pureza del lenguaje. 

Algunos versos hay, (el 1.° y 14.° de cada estrofa), que, leídos, quedan cortos en buena ley métrica; sin embargo, yo no sé cómo, pero la verdad es que ajustan perfectamente a la música especial a que se hallan acomodados, sin que quepa introducir en ellos reforma ni cambio alguno.

Solamente debe exceptuarse de este juicio mío el verso noveno de la tercera estrofa, Zaldi orri nic, que es muy corto a todas luces, y que en mi humilde concepto, quedaría mejor corregido en esta forma:

Zaldi gaiso orri, el José-Mari, a quien se alude, era el dueño o encargado del caballo en cuestión.

A los pocos meses de escrita la composición de Vilinch, hubo necesidad de dar muerte a aquel pobre penco, viejo, enfermo, e inútil para todo trabajo, y entonces añadió Bizcarrondo a dicha poesía las dos estrofas que aparecen a su final, destinada la primera a lamentar el triste fin de aquel pobre caballo blanco, y la segunda que constituye su Epitafio, (!) las cuales en nada desmerecen del resto de la obra. 

El asunto, manejado por Vilinch con tanta gracia y habilidad, es muy común a los poetas vascos, y son varias las composiciones de análoga índole que he visto escritas en los diversos dialectos, pero en ninguna encuentro el mérito ni la perfección que en la del malogrado Bizcarrondo, por más que la mayor parte de ellas ofrezcan rasgos aislados, especialmente en la descripción, que no carecen de gracia.

Recuerdo, entre otras, las poesías tituladas Ikhazketaco mandoa, escrita en un dialecto mixto, (alto y bajo-navarro), dada a conocer por los ilustrados filólogos MM. Michel y Sallaberry, en sus respectivas colecciones; Ampleren Zamaria é Ichkerraren zamaria, que sin más cambio que el nombre del título y una que otra ligera diferencia son la misma composición en dialecto suletino; otra anónima, en el mismo dialecto, denominada Asto zahar bat; otra más, anónima también, que comienza con el verso Behor bat erosi dut, adin onecua..., reproducida también por M. Michel; otra de un modesto pero laboriosísimo artesano de esta ciudad, que lleva el título de Erdaldun baten zaldiyari, escrita en dialecto guipuzcoano, y de fecha muy reciente; unos Verso berriac, en el mismo dialecto, impresos en Tolosa, en casa de la viuda de Mendizábal, en 1867, sin otro título, y que comienzan así:

Zaldi ecuscarri bat 

Irunen saldu da..., 

y por último, otros, anónimos también, impresos en la misma casa y forma, sin fecha de impresión, y que principian:

Marcos Lasartecuac

Saldu du zaldiya..., 

pero ninguna de dichas producciones me satisface en conjunto, ni con mucho, lo que la afortunada inspiración de Vilinch, que tengo el gusto de ofrecer en este tomo a los lectores del Cancionero.

Si siempre es difícil la traducción de cualquiera composición de una lengua como la euskara, tan original y tan diversa en su construcción de todas las demás conocidas, esta dificultad crece de punto cuando se trata, en general, de poesías satíricas, y mucho más cuando éstas tienen el colorido local especial de la de Vilinch.

En vez de ofrecer, pues, una versión literal de ella, completamente desnuda de galas, y que había de carecer necesariamente de toda la gracia del original, prefiero reproducir en su lugar la traducción hecha 

ad libitum en romance castellano por mi amigo Serafín Baroja, que aunque inferior indudablemente al original, no carece de cierto mérito.

Zaldi baten bicitza ha sido puesta en música por D. Juan José Santesteban, y arreglada para canto y piano por su hijo J. A. forma parte de la notable Colección de Aires Vascongados de dicho Maestro, en la que figura con el núm. 18.

He aquí ahora la composición original de Vilinch:

Zaldi (1) baten bicitza. (2)


Orra (3) sei berso cale-

Garbitzalleari, (4)

Ceña (5) bere icenez (6) 

Dan José Mari:

Erreza (7) lezazquique

Iru Ave Mari,

Indarra etortzeco

Zaldi zuriari,

Animali ori 

Urriqui (8) zait neri,

Falta du ugari (9)

Egoteco guri, (10)

Cartoyaquiñ eguiña

Dala diruri. (11)


Goizero (12) bear diyo,

Eraso (13) lanari,

Ciquiñac (14) bildu arte

Erri danari:

Berriz ere obeto (15) 

Bici ez danari,

Nabarbenduco zaizca (16) 

Ezurrac (17) ugari:

Ez naiz chanchaz ari 

Eta Joshé Mari,

Zaldi gaisoari, (18)

Nai aña janari (19)

Eman zayozu, ea 

Jartzen dan lodi. (20)


Dago (21) esqueletuen

Ichurac arturic; (22)

¡Diña (23) jan ezac dauca

Orrela galduric!

¿Nola ez da egongo 

Oso argalduric, (24) 

Iruquitzen (25) badute 

Ascotan barauric? (26) 

Zaldi orri nic (a: Véase la observación de la página 4.a)

Ez det esperoric 

Ecer icusteric 

Ezurrac besteric,

Ez du beintzat izango 

Odol golperic.


Lana sobra du bañan 

Janaria falta,

Urriquigarria da

Dacarren planta:

Gaisoac ez lezaque 

Luzaro (27) aguanta, 

Flaquiarequin (28) ecin 

Muguitu (29) du anca, (30) 

Pentsu guchi jan ta

Calean giraca, (31)

Gaizqui bici da ta

Indarric ez daca,

Ecin carriatu du (32) 

Carro bat caca.


Munduan ez liteque 

Zaldiric arquitu, (33) 

Duenic orrec aña 

Pena sufritu:

Biotzic gogorrena, 

Lezaque cupitu, (31) 

Ez du zartzera (35) charra 

Gaisoac achitu, (36) 

Pausua naguitu, (37) 

Ecin da muguitu,

Zaldi orrec ditu

Zazpi espiritu,

Bestela bicirican

Ecin guelditu. 


Guisagaisoaz (38) danac 

Pena artzazute,

Baldin biotz biguñac

Badituzute:

Asi zan egunetic

Eta orain arte,

Serbitzuba eguin du 

Errian bastante,

Igande ta aste

Jayarequin (39) naste (40)

Maquiñabat (41) urte 

Pasa dizquitzute:

Orain erretirua

Mereci luque.


Zaldiaren eriotza. (42)


Indarra cecan arte 

Ciquiña carrayo, 

Eraguiten (43) cioten 

Maquiñabat zayo: 

¡Bañan miñez (44) jarri da! 

¡Indarra (45) juan zayo!

¡Nequearen (46) pagua

Balaz eman zayo! 


Obizdea. (47)


Azquenac (48) emen daude 

Zaldi argal baten, 

Ceñac ez zuen iñoiz

Pentzu on bat jaten.

¡Guelditu zaizcan mami (49) 

Puzcac eramaten,

Beliac (50) lan ascoric

Apenas daucaten.

R. I. P. Amen.


La vida de un caballo.


José-Mari, si no tienes

De pórfido el corazón,

Reza tres Ave-Marías

Al cristo de tu fervor

Por si recobra las fuerzas

Tu penco blanco, sinó

Te se muere el mejor día

Al uncirlo al carretón.

Entre las gentes no se habla

De otra cosa, créelo:

¿Sabes tú lo que se dice?

Que el caballo es de cartón.


Con el alba ya comienza

A recorrer todo el pueblo

Arrastrando las basuras

Que José va recogiendo.

¡Qué animal fuera capaz 

De resistir tal trecheo

Sin quedarse en cuatro días

Tan sólo con el pellejo! 

Sin bromas, José María,

No le niegues el sustento,

Y con el susto le matas,

Que quizá gane con ello.


Tiene ya de un esqueleto

La triste, horrorosa pinta;

¿Cómo no, si es almanaque

Que apunta siempre vigilia,

Mientras que el pobre trabaja 

Sin cesar de noche y día?

Me temo que se le vayan

Desarmando las clavijas

Y amojone las callejas

Con puntos de sus costillas.

De fijo que no se muere

De ataque de apoplejía.


Sóbranle palo y trabajo,

Fáltanle paja y cebada,

Lastimosísima y lúgubre

Es ya su estirada estampa;

El infeliz ya no puede

Sobrellevar tantas cargas,

Pues de puro flaco y débil

Se le entumecen las ancas.

Perdidas las fuerzas todas,

A pesar de lo que alampa,

No le es posible, no puede,

Con un carretón de ca... (caca) 

En el universo mundo

No existe ningún caballo

Que haya sufrido como este

Los rigores de su esta...blo (establo).

A su presencia se ablanda

El corazón más ingrato.

¡Vaya una vejez tranquila 

La que al pobre le ha tocado!

Encogidos los tendones

Le sale a calambre el paso,

Debe tener siete espíritus,

De fijo, como los gatos.


Señores, es necesario

Compadecernos de él ya,

Si todavía tenemos

Amor a la.... humanidad.

Desde que vino a este valle

De llanto y de votovás. 

Sin pretexto de Domingos

Ni de fiestas de guardar,

Ha prestado sus servicios

A toda la vecindad.

¿No merece con justicia

Que se le jubile ya? 


La muerte del caballo. 


Mientras conservó las fuerzas,

Uncido siempre a su carro, 

A la sociedad sirvió

Su suciedad ahuyentando.

Pero al fin no pudo más:

¡El pobrete cayó malo!

¡Y el premio de sus servicios

A balazos se le ha dado!


Epitafio. 


Yacen aquí los mortales

Restos de un pobre corcel,

Quien no consiguió en su vida 

Un pienso bueno comer.

¡Chasco se llevan los cuervos

Que se abalancen sobre él!

R. I. P. Amen.


NOTAS FILOLÓGICAS Y GRAMATICALES. 

(1) Zaldi, zaldia, zaldiya o zaldija, en los div. dial., caballo.

De esta palabra proceden las voces zaldiz, a caballo, zaldun, zalduna, (Zaldi-dubena o duena), caballero, zaldi-dun, zaldi-duna, (como se dice por la parte de Guethary), y zaldizcoa, de a caballo. Empléase también para expresar el caballo, especialmente en los dial. sulet., lab. y bn., la voz zamaria, que expresa mejor la idea de bestia de carga, de zama, carga, fardo, etc., derivándose de ella las voces zamaldun, bn., caballero, y zamariz, lab., bn., sulet., a caballo.

(2) Bicitza, bizitza, guip., bizitze, bizitzea, vizc. vida. 

(3) Orra, guip., vizc., horrá, lab., bn., he aquí.

(4) Garbitzallea, el que limpia una cosa, de garbi, limpio, puro, propio, y garbitu, garbitzen, limpiar. Cale-garbitzallea, es, pues, el encargado 

de la limpieza de las calles. (Cale : kalea)

(5) Ceña, zeña o zeina, en los div. dial., pronombre relativo, que, el cual, de zeñ, zein, que, cual.

(6) Icen o izen, en los div. dial., nombre. De ahí la voz izengoiti, izengoitia, guip., vizc., lab., izen-goith*, a, bn., sobre-nombre, apodo, y los verbos izendatu, izendatzen, guip., lab., bn., nombrar, e izendau, vizc., designar.

(7) Erreza, errezatu, errezatzen. Rogar a Dios, rezar. Mr. Chaho opina que este verbo procede del latino recitare, leer en alta voz, recitar, etc.

(8) Urriquitu, urriquitzen, guip., vizc., urrikaltu, urrikaltzen, lab., bn., tener compasión, excitar compasión.

(9) Ugari, guip., vizc., abundante.

(10) Guri, guria, guriya, en los div. dial., grueso, mantecoso. En el dial. guip., empléase también, en la misma acepción, la voz mardul, mardula.

(11) Dirudi, es 3.a pers. del pres. de indic. del verbo irudi, iruditzen, guip., vizc., iduri, iduritzen, lab., bn., iduri, iduritu, bn., parecer, parecerse, asemejar. De los irregulares de este verbo colige el P. Larramendi que es irudi y no iduri, aunque es más usado en esta última forma, "pues no se dice didurit sino dirudit, etc." El mismo origen reconocen las voces iduripen, iduripena, suposición, figuración, e idurikoz, por conjetura.

(12) Goizero, cada mañana, de goiz, guip., lab., bn., goich o gox, vizc., temprano, goiza o goicha, la mañana.

(13) Eraso, erasotzen, acometer.

(14) Ciquin o ziquiñ, ziquiña, guip., vizc., lab., zikhin, bn., sucio, suciedad, porquería.

(15) Obeto, guip., vizc., mejor, comparativo irregular de ondo.

(16) Nabarbendu, nabarbentzen., guip., nabarbentu, nabarbentzen. Empléase este verbo, cuya significación tantas dudas parece ofrecer a M. Van-Eys, en las acepciones generales de exagerar, poner de relieve, resaltar (o hacer resaltar), así como también la voz nabarbena, exagerado.

(17) Ezur, ezura, guip., vizc., hezur, hezura, lab., bn., hueso. - Ezurrac, los huesos. 

(18) Gaicho, gaicha, gaisso, gaissa, guip., vizc., gaizo, gaiza, lab., bn., pobre, pobrecillo. Es expresión de ternura, de cariño o de compasión.

(19) Janari, guip., vizc., janhari, lab., bn., alimento, (de jan-ari.)

(20) Jarri, jartzen, guip., lab., jarri, jasarri, vizc., jar, jarri, jartzen, bn., ponerse. Lodi, en los div. dial. grueso, gordo.

(21) Dago, es 3.a pers. del sing. del pres. de indic. del verbo egon, egondu, egoten, (egoiten en lab.), estar, permanecer. Este verbo se conjuga bien en la forma regular, nago, ago, dago, etc., bien con el auxiliar, egoten naiz, egoten zera, egoten da, etc.

(22) Ichura, guip., vizc., itchura, lab., bn., apariencia, aspecto.

Artu, artzen, guip., vizc., hartu, hartzen, lab., bn., aceptar, tomar, recibir.

(23) Din, diña, bastante, lo suficiente. Empléase también esta voz en el concepto de igual, tanto, como en este ejemplo: Aren diña banaiz, soy tanto como aquel, o no soy menos que aquel. Mr. Chaho juzga 

que din y diña, sean quizás una abreviación de ber-diñ, berdiña, (bardiñ, bardiña, en vizc.), igual, semejante, opinión que no juzgo desacertada, pues berdiñ y berdiña, no son a su vez, en mi concepto, otra cosa que una contracción de beardiñ, beardiña, lo necesario o lo suficiente.

(24) Argal, argala, guip., vizc., débil; en bn. escaso. - De la misma raíz proceden la voz argaltasun, argaltasuna, y el verbo argaldu, argaltzen, debilitarse.

(25) Iruqui, iduqui, guip., euqui, vizc., tener.

(26) Barauric, en ayunas. Babautu, barurtu, estar en ayunas. En vez de este verbo se emplea mejor y más comúnmente el adjetivo barau con ayuda del auxiliar. 

(27) Luzaro, guip., bn., luzaran, lab., en mucho tiempo.

(28) Flaquia, flaquiya, guip., debilidad, falta de alimentación. Es una de las rarísimas voces que en lengua euskara se encuentran con la inicial f, pues esta letra no es vascongada, y no se halla sino en palabras tomadas de otros idiomas. (N. E. flaqueza, flaco, flaca)

(29) Muguitu, muguitzen, guip., mover.

(30) Anca, anka, ank'ezurra, guip., vizc., lab., pata, pierna, cadera, muslo. El P. Larramendi, hace esta voz originaria del euskara. Mr. Chaho se inclina a creer que procede de la griega *ankos, que significa curvatura ángulo saliente.

(31) Giraca, a vueltas. De gira, círculo, vuelta.

(32) Carriatu, carreatu, garrayatu, acarrear, llevar cargas de cualquiera manera, y carreatu, propiamente cuando se trasportan en carro, según el P. Larramendi. 

(33) Arquitu o arkitu, arkitzen, guip., aurkitu, vizc., aurkitu, lab., bn., encontrar, hallar.

(34) Cupitu, cupitzen, compadecerse.

(35) Zartzera, guip., vejez, de zar, zarra, guip., zaar, zaarra, vizc., zahar, zaharra, lab., bn., viejo.

(36) Achitu, achitzen, atzitu, atzitzen, guip., alcanzar, coger.

(37) Naguitu, (de la voz nagui, nagi, guip., lab., bn., perezoso), desmedrar, acortar, disminuir.

(38) Guisagaizoa, pobrete, procede indudablemente de las voces guisa, gisa, modo, manera, aspecto, apariencia, y gaiso, gaisa, pobre.

(39) Jai, jaya, guip., vizc., lab., jei, jeya, lab., fiesta. De ahí jayegun, jayeguna, día de fiesta.

(40) Nastu, nasten, guip., naastu, vizc., nahas, nahasi, nahasten o nahastatzen, lab., bn., mezclar, (y también importunar.) 

(41) Maquiñabat urte. Hace bastantes años.

(42) Eriotz, eriotza, guip., vizc., erijotz, erijotza, vizc., heriotz, heriotze, bn., muerte; de eri, enfermedad, dolor, y otz, otza, frío.

(43) Eraguin, erain, guip., vizc., eguin arazi, lab. hacer hacer u obligar a hacer. 

(44) Miñez, guip., enfermo, de miñ o min, mal, dolor.

(45) Indar, indarra, en los div. dial., fuerza, esfuerzo.

(46) Neque, nequea, guip., vizc., lab., trabajo, fatiga.

(47) Obizdea, epitafio, procede de la raíz obi, guip. hobi, lab., bn., tumba, fosa. Iztueta emplea con la misma acepción la voz Obiandea. (N. E. óbito, obiit, obitum &c.)

(48) Azquenak, los restos, de asken, askena, lo último, lo postrero.

(49) Mami, mamia, guip., magro, sin hueso. Mami-puzcac, expresa aquí los pedazos de carne. La voz mami suele emplearse también en el concepto de cosa de dentro, íntima, y así se dice: adisquide mami bat, un amigo íntimo, ogui mamia, miga de pan.

(50) Bele, belia, belhia, en los div. dial., cuervo.

Poesía por don Indalecio Bizcarrondo, 

Vilinch. 

(Dialecto guipuzcoano) 


Zaldi baten bicitza.


Entre las poesías festivas y satíricas del país vasco, no habrá quizás una que haya alcanzado mayor popularidad que esta del malogrado vate donostiarra Vilinch. Había allá por los años 1860 - si mi memoria no me es infiel, - un carro tirado por un jamelgo blanco, destinado a la limpieza de las calles de San Sebastián. El pobre penco, encargado de tan penosa tarea cotidiana, había enflaquecido hasta lo imposible, a fuerza de palo y de trabajo, y quizás también de la no sobra de alimento.

Aquella arpa viviente, aquella sombra de caballo, que recorría sin cesar las calles de la ciudad uncido a su carro, inspiró al pobre Vilinch esta composición, llena de gracia, conocida vulgarmente con el nombre 

de Zaldi zuriyarena.

Esta poesía, una de las pocas festivas de Vilinch, acreditó más y más el nombre de este desgraciado poeta, e inmortalizó a aquel infeliz caballo blanco, casi tan popular en nuestro país como lo es en Castilla el famoso Rocinante del celebérrimo Don Quijote de la Mancha. 

Zaldi baten bicitza, con todo y estar escrita sobre un asunto tan pobre y vulgar, sobrevivirá mientras se hable la lengua euskara como una de las mejores composiciones satíricas escritas en dicho idioma, por la espontaneidad que revela, por lo gráfico de la pintura, la viveza del colorido, y la pureza del lenguaje. 

Algunos versos hay, (el 1.° y 14.° de cada estrofa), que, leídos, quedan cortos en buena ley métrica; sin embargo, yo no sé cómo, pero la verdad es que ajustan perfectamente a la música especial a que se hallan acomodados, sin que quepa introducir en ellos reforma ni cambio alguno.

Solamente debe exceptuarse de este juicio mío el verso noveno de la tercera estrofa, Zaldi orri nic, que es muy corto a todas luces, y que en mi humilde concepto, quedaría mejor corregido en esta forma:

Zaldi gaiso orri, el José-Mari, a quien se alude, era el dueño o encargado del caballo en cuestión.

A los pocos meses de escrita la composición de Vilinch, hubo necesidad de dar muerte a aquel pobre penco, viejo, enfermo, e inútil para todo trabajo, y entonces añadió Bizcarrondo a dicha poesía las dos estrofas que aparecen a su final, destinada la primera a lamentar el triste fin de aquel pobre caballo blanco, y la segunda que constituye su Epitafio, (!) las cuales en nada desmerecen del resto de la obra. 

El asunto, manejado por Vilinch con tanta gracia y habilidad, es muy común a los poetas vascos, y son varias las composiciones de análoga índole que he visto escritas en los diversos dialectos, pero en ninguna encuentro el mérito ni la perfección que en la del malogrado Bizcarrondo, por más que la mayor parte de ellas ofrezcan rasgos aislados, especialmente en la descripción, que no carecen de gracia.

Recuerdo, entre otras, las poesías tituladas Ikhazketaco mandoa, escrita en un dialecto mixto, (alto y bajo-navarro), dada a conocer por los ilustrados filólogos MM. Michel y Sallaberry, en sus respectivas colecciones; Ampleren Zamaria é Ichkerraren zamaria, que sin más cambio que el nombre del título y una que otra ligera diferencia son la misma composición en dialecto suletino; otra anónima, en el mismo 

dialecto, denominada Asto zahar bat; otra más, anónima también, que comienza con el verso Behor bat erosi dut, adin onecua..., reproducida también por M. Michel; otra de un modesto pero laboriosísimo artesano de esta ciudad, que lleva el título de Erdaldun baten zaldiyari, escrita en 

dialecto guipuzcoano, y de fecha muy reciente; unos Verso berriac, en el mismo dialecto, impresos en Tolosa, en casa de la viuda de Mendizábal, en 1867, sin otro título, y que comienzan así:

Zaldi ecuscarri bat 

Irunen saldu da..., 

y por último, otros, anónimos también, impresos en la misma casa y forma, sin fecha de impresión, y que principian:

Marcos Lasartecuac

Saldu du zaldiya..., 

pero ninguna de dichas producciones me satisface en conjunto, ni con mucho, lo que la afortunada inspiración de Vilinch, que tengo el gusto de ofrecer en este tomo a los lectores del Cancionero.

Si siempre es difícil la traducción de cualquiera composición de una lengua como la euskara, tan original y tan diversa en su construcción de todas las demás conocidas, esta dificultad crece de punto cuando se trata, en general, de poesías satíricas, y mucho más cuando éstas tienen el colorido local especial de la de Vilinch.

En vez de ofrecer, pues, una versión literal de ella, completamente desnuda de galas, y que había de carecer necesariamente de toda la gracia del original, prefiero reproducir en su lugar la traducción hecha 

ad libitum en romance castellano por mi amigo Serafín Baroja, que aunque inferior indudablemente al original, no carece de cierto mérito.

Zaldi baten bicitza ha sido puesta en música por D. Juan José Santesteban, y arreglada para canto y piano por su hijo J. A. forma parte de la notable Colección de Aires Vascongados de dicho Maestro, en la que figura con el núm. 18.

He aquí ahora la composición original de Vilinch:

Zaldi (1) baten bicitza. (2)


Orra (3) sei berso cale-

Garbitzalleari, (4)

Ceña (5) bere icenez (6) 

Dan José Mari:

Erreza (7) lezazquique

Iru Ave Mari,

Indarra etortzeco

Zaldi zuriari,

Animali ori 

Urriqui (8) zait neri,

Falta du ugari (9)

Egoteco guri, (10)

Cartoyaquiñ eguiña

Dala diruri. (11)


Goizero (12) bear diyo,

Eraso (13) lanari,

Ciquiñac (14) bildu arte

Erri danari:

Berriz ere obeto (15) 

Bici ez danari,

Nabarbenduco zaizca (16) 

Ezurrac (17) ugari:

Ez naiz chanchaz ari 

Eta Joshé Mari,

Zaldi gaisoari, (18)

Nai aña janari (19)

Eman zayozu, ea 

Jartzen dan lodi. (20)


Dago (21) esqueletuen

Ichurac arturic; (22)

¡Diña (23) jan ezac dauca

Orrela galduric!

¿Nola ez da egongo 

Oso argalduric, (24) 

Iruquitzen (25) badute 

Ascotan barauric? (26) 

Zaldi orri nic (a: Véase la observación de la página 4.a)

Ez det esperoric 

Ecer icusteric 

Ezurrac besteric,

Ez du beintzat izango 

Odol golperic.


Lana sobra du bañan 

Janaria falta,

Urriquigarria da

Dacarren planta:

Gaisoac ez lezaque 

Luzaro (27) aguanta, 

Flaquiarequin (28) ecin 

Muguitu (29) du anca, (30) 

Pentsu guchi jan ta

Calean giraca, (31)

Gaizqui bici da ta

Indarric ez daca,

Ecin carriatu du (32) 

Carro bat caca.


Munduan ez liteque 

Zaldiric arquitu, (33) 

Duenic orrec aña 

Pena sufritu:

Biotzic gogorrena, 

Lezaque cupitu, (31) 

Ez du zartzera (35) charra 

Gaisoac achitu, (36) 

Pausua naguitu, (37) 

Ecin da muguitu,

Zaldi orrec ditu

Zazpi espiritu,

Bestela bicirican

Ecin guelditu. 


Guisagaisoaz (38) danac 

Pena artzazute,

Baldin biotz biguñac

Badituzute:

Asi zan egunetic

Eta orain arte,

Serbitzuba eguin du 

Errian bastante,

Igande ta aste

Jayarequin (39) naste (40)

Maquiñabat (41) urte 

Pasa dizquitzute:

Orain erretirua

Mereci luque.


Zaldiaren eriotza. (42)


Indarra cecan arte 

Ciquiña carrayo, 

Eraguiten (43) cioten 

Maquiñabat zayo: 

¡Bañan miñez (44) jarri da! 

¡Indarra (45) juan zayo!

¡Nequearen (46) pagua

Balaz eman zayo! 


Obizdea. (47)


Azquenac (48) emen daude 

Zaldi argal baten, 

Ceñac ez zuen iñoiz

Pentzu on bat jaten.

¡Guelditu zaizcan mami (49) 

Puzcac eramaten,

Beliac (50) lan ascoric

Apenas daucaten.

R. I. P. Amen.



La vida de un caballo.


José-Mari, si no tienes

De pórfido el corazón,

Reza tres Ave-Marías

Al cristo de tu fervor

Por si recobra las fuerzas

Tu penco blanco, sinó

Te se muere el mejor día

Al uncirlo al carretón.

Entre las gentes no se habla

De otra cosa, créelo:

¿Sabes tú lo que se dice?

Que el caballo es de cartón.


Con el alba ya comienza

A recorrer todo el pueblo

Arrastrando las basuras

Que José va recogiendo.

¡Qué animal fuera capaz 

De resistir tal trecheo

Sin quedarse en cuatro días

Tan sólo con el pellejo! 

Sin bromas, José María,

No le niegues el sustento,

Y con el susto le matas,

Que quizá gane con ello.



Tiene ya de un esqueleto

La triste, horrorosa pinta;

¿Cómo no, si es almanaque

Que apunta siempre vigilia,

Mientras que el pobre trabaja 

Sin cesar de noche y día?

Me temo que se le vayan

Desarmando las clavijas

Y amojone las callejas

Con puntos de sus costillas.

De fijo que no se muere

De ataque de apoplejía. 


Sóbranle palo y trabajo,

Fáltanle paja y cebada,

Lastimosísima y lúgubre

Es ya su estirada estampa;

El infeliz ya no puede

Sobrellevar tantas cargas,

Pues de puro flaco y débil

Se le entumecen las ancas.

Perdidas las fuerzas todas,

A pesar de lo que alampa,

No le es posible, no puede,

Con un carretón de ca... (caca) 

En el universo mundo

No existe ningún caballo

Que haya sufrido como este

Los rigores de su esta...blo (establo).

A su presencia se ablanda

El corazón más ingrato.

¡Vaya una vejez tranquila 

La que al pobre le ha tocado!

Encogidos los tendones

Le sale a calambre el paso,

Debe tener siete espíritus,

De fijo, como los gatos.


Señores, es necesario

Compadecernos de él ya,

Si todavía tenemos

Amor a la.... humanidad.

Desde que vino a este valle

De llanto y de votovás. 

Sin pretexto de Domingos

Ni de fiestas de guardar,

Ha prestado sus servicios

A toda la vecindad.

¿No merece con justicia

Que se le jubile ya? 


La muerte del caballo. 


Mientras conservó las fuerzas,

Uncido siempre a su carro, 

A la sociedad sirvió

Su suciedad ahuyentando.

Pero al fin no pudo más:

¡El pobrete cayó malo!

¡Y el premio de sus servicios

A balazos se le ha dado!


Epitafio. 


Yacen aquí los mortales

Restos de un pobre corcel,

Quien no consiguió en su vida 

Un pienso bueno comer.

¡Chasco se llevan los cuervos

Que se abalancen sobre él!

R. I. P. Amen.


NOTAS FILOLÓGICAS Y GRAMATICALES. 

aquimequedo

(1) Zaldi, zaldia, zaldiya o zaldija, en los div. dial., caballo.

De esta palabra proceden las voces zaldiz, a caballo, zaldun, zalduna, (Zaldi-dubena o duena), caballero, zaldi-dun, zaldi-duna, (como se dice por la parte de Guethary), y zaldizcoa, de a caballo. Empléase también para expresar el caballo, especialmente en los dial. sulet., lab. y bn., la voz zamaria, que expresa mejor la idea de bestia de carga, de zama, carga, fardo, etc., derivándose de ella las voces zamaldun, bn., caballero, y zamariz, lab., bn., sulet., a caballo.

(2) Bicitza, bizitza, guip., bizitze, bizitzea, vizc. vida. 

(3) Orra, guip., vizc., horrá, lab., bn., he aquí.

(4) Garbitzallea, el que limpia una cosa, de garbi, limpio, puro, propio, y garbitu, garbitzen, limpiar. Cale-garbitzallea, es, pues, el encargado de la limpieza de las calles. (Cale : kale, kalea)

(5) Ceña, zeña o zeina, en los div. dial., pronombre relativo, que, el cual, de zeñ, zein, que, cual.

(6) Icen o izen, en los div. dial., nombre. De ahí la voz izengoiti, izengoitia, guip., vizc., lab., izen-goith*, a, bn., sobre-nombre, apodo, y los verbos izendatu, izendatzen, guip., lab., bn., nombrar, e izendau, vizc., designar.

(7) Erreza, errezatu, errezatzen. Rogar a Dios, rezar. Mr. Chaho opina que este verbo procede del latino recitare, leer en alta voz, recitar, etc.

(8) Urriquitu, urriquitzen, guip., vizc., urrikaltu, urrikaltzen, lab., bn., tener compasión, excitar compasión.

(9) Ugari, guip., vizc., abundante.

(10) Guri, guria, guriya, en los div. dial., grueso, mantecoso. En el dial. guip., empléase también, en la misma acepción, la voz mardul, mardula.

(11) Dirudi, es 3.a pers. del pres. de indic. del verbo irudi, iruditzen, guip., vizc., iduri, iduritzen, lab., bn., iduri, iduritu, bn., parecer, parecerse, asemejar. De los irregulares de este verbo colige el P. Larramendi que es irudi y no iduri, aunque es más usado en esta última forma, "pues no se dice didurit sino dirudit, etc." El mismo origen reconocen las voces iduripen, iduripena, suposición, figuración, e idurikoz, por conjetura.

(12) Goizero, cada mañana, de goiz, guip., lab., bn., goich o gox, vizc., temprano, goiza o goicha, la mañana.

(13) Eraso, erasotzen, acometer.

(14) Ciquin o ziquiñ, ziquiña, guip., vizc., lab., zikhin, bn., sucio, suciedad, porquería.

(15) Obeto, guip., vizc., mejor, comparativo irregular de ondo.

(16) Nabarbendu, nabarbentzen., guip., nabarbentu, nabarbentzen. Empléase este verbo, cuya significación tantas dudas parece ofrecer a M. Van-Eys, en las acepciones generales de exagerar, poner de relieve, resaltar (o hacer resaltar), así como también la voz nabarbena, exagerado.

(17) Ezur, ezura, guip., vizc., hezur, hezura, lab., bn., hueso. - Ezurrac, los huesos. 

(18) Gaicho, gaicha, gaisso, gaissa, guip., vizc., gaizo, gaiza, lab., bn., pobre, pobrecillo. Es expresión de ternura, de cariño o de compasión.

(19) Janari, guip., vizc., janhari, lab., bn., alimento, (de jan-ari.)

(20) Jarri, jartzen, guip., lab., jarri, jasarri, vizc., jar, jarri, jartzen, bn., ponerse. Lodi, en los div. dial. grueso, gordo.

(21) Dago, es 3.a pers. del sing. del pres. de indic. del verbo egon, egondu, egoten, (egoiten en lab.), estar, permanecer. Este verbo se conjuga bien en la forma regular, nago, ago, dago, etc., bien con el auxiliar, egoten naiz, egoten zera, egoten da, etc.

(22) Ichura, guip., vizc., itchura, lab., bn., apariencia, aspecto.

Artu, artzen, guip., vizc., hartu, hartzen, lab., bn., aceptar, tomar, recibir.

(23) Din, diña, bastante, lo suficiente. Empléase también esta voz en el concepto de igual, tanto, como en este ejemplo: Aren diña banaiz, soy tanto como aquel, o no soy menos que aquel. Mr. Chaho juzga 

que din y diña, sean quizás una abreviación de ber-diñ, berdiña, (bardiñ, bardiña, en vizc.), igual, semejante, opinión que no juzgo desacertada, pues berdiñ y berdiña, no son a su vez, en mi concepto, otra cosa que una contracción de beardiñ, beardiña, lo necesario o lo suficiente.

(24) Argal, argala, guip., vizc., débil; en bn. escaso. - De la misma raíz proceden la voz argaltasun, argaltasuna, y el verbo argaldu, argaltzen, debilitarse.

(25) Iruqui, iduqui, guip., euqui, vizc., tener.

(26) Barauric, en ayunas. Babautu, barurtu, estar en ayunas. En vez de este verbo se emplea mejor y más comúnmente el adjetivo barau con ayuda del auxiliar. 

(27) Luzaro, guip., bn., luzaran, lab., en mucho tiempo.

(28) Flaquia, flaquiya, guip., debilidad, falta de alimentación. Es una de las rarísimas voces que en lengua euskara se encuentran con la inicial f, pues esta letra no es vascongada, y no se halla sino en palabras tomadas de otros idiomas. (N. E. flaqueza, flaco, flaca)

(29) Muguitu, muguitzen, guip., mover.

(30) Anca, anka, ank'ezurra, guip., vizc., lab., pata, pierna, cadera, muslo. El P. Larramendi, hace esta voz originaria del euskara. Mr. Chaho se inclina a creer que procede de la griega *ankos, que significa curvatura ángulo saliente.

(31) Giraca, a vueltas. De gira, círculo, vuelta.

(32) Carriatu, carreatu, garrayatu, acarrear, llevar cargas de cualquiera manera, y carreatu, propiamente cuando se trasportan en carro, según el P. Larramendi. 

(33) Arquitu o arkitu, arkitzen, guip., aurkitu, vizc., aurkitu, lab., bn., encontrar, hallar.

(34) Cupitu, cupitzen, compadecerse.

(35) Zartzera, guip., vejez, de zar, zarra, guip., zaar, zaarra, vizc., zahar, zaharra, lab., bn., viejo.

(36) Achitu, achitzen, atzitu, atzitzen, guip., alcanzar, coger.

(37) Naguitu, (de la voz nagui, nagi, guip., lab., bn., perezoso), desmedrar, acortar, disminuir.

(38) Guisagaizoa, pobrete, procede indudablemente de las voces guisa, gisa, modo, manera, aspecto, apariencia, y gaiso, gaisa, pobre.

(39) Jai, jaya, guip., vizc., lab., jei, jeya, lab., fiesta. De ahí jayegun, jayeguna, día de fiesta.

(40) Nastu, nasten, guip., naastu, vizc., nahas, nahasi, nahasten o nahastatzen, lab., bn., mezclar, (y también importunar.) 

(41) Maquiñabat urte. Hace bastantes años.

(42) Eriotz, eriotza, guip., vizc., erijotz, erijotza, vizc., heriotz, heriotze, bn., muerte; de eri, enfermedad, dolor, y otz, otza, frío.

(43) Eraguin, erain, guip., vizc., eguin arazi, lab. hacer hacer u obligar a hacer. 

(44) Miñez, guip., enfermo, de miñ o min, mal, dolor.

(45) Indar, indarra, en los div. dial., fuerza, esfuerzo.

(46) Neque, nequea, guip., vizc., lab., trabajo, fatiga.

(47) Obizdea, epitafio, procede de la raíz obi, guip. hobi, lab., bn., tumba, fosa. Iztueta emplea con la misma acepción la voz Obiandea. (N. E. óbito, obiit, obitum &c.)

(48) Azquenak, los restos, de asken, askena, lo último, lo postrero.

(49) Mami, mamia, guip., magro, sin hueso. Mami-puzcac, expresa aquí los pedazos de carne. La voz mami suele emplearse también en el concepto de cosa de dentro, íntima, y así se dice: adisquide mami bat, un amigo íntimo, ogui mamia, miga de pan.

(50) Bele, belia, belhia, en los div. dial., cuervo.

caballo, blanco, delgado, flaco, Rocinante, zuriyarena